La inquisición chariprogre es un monstruo que necesita comer cada día. Después de Rubiales no llega la paz sino el próximo plato. El penúltimo campo de batalla es un chat de Wasap de estudiantes de la Universidad de la Rioja en el que dicen que les gustan las chicas. No sólo que les gustan, sino que les gustan sexualmente. ¿Acaso se puede tolerar tamaña desfachatez?
📲 "Hay que partirles las bragas": los mensajes en el grupo de WhatsApp de los estudiantes de Magisterio de la Universidad de La Rioja a sus nuevas compañeras
✍🏼 Una información de @dsacristang en @RadioRiojahttps://t.co/NlhIIvcmiR pic.twitter.com/ohMSMeUPyI
— Cadena SER (@La_SER) September 8, 2023
Para empezar cabría establecer que el móvil de ningún chaval resistiría el exámen de un tribunal de la inquisición de la SER o de El País. Salvo que fuera medio humano, medio paramecio. Es más, nadie resistiríamos un exámen de la privacidad de todas nuestras conversaciones orales o escritas si quedaran registradas y sometidos a público escrutinio. ¿Lo resistirían los chats de las chicas? Seguramente tampoco. ¿Vamos a criminalizar la mínima zafiedad?
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A lo largo de una semana es imposible decir algo que no ofenda a la ley, la moral, las buenas costumbres, el estado socialista o el peluquín del vecino. Ir a cazar chavales a un chat de Wasap es mucho más sucio que lo que se pueda decir en ese chat. El chat que nos gustaría ver es el de los redactores de la SER o de El País, el de Pedro Sánchez, el de Otegui, o el de los líderes de Podemos, o el de todos los diputados socialistas que negaron al tito Berni y después cantó el gallo. Qué fácil es ir contra cuatro chavales en un chat irrumpiendo en su intimidad. Qué enemigo más pequeño ha elegido la SER.
Las personas interesadas en aportar información o presentar una denuncia puede hacerlo a través del correo-e: igualdad.inclusion@unirioja.es
— Universidad de La Rioja (@unirioja) September 8, 2023
La Universidad de la Rioja se sumó a la implacable cacería contra sus alumnos en cuanto seguramente el rector vio que la siguiente víctima de los mastines chariprogres podría ser él. ¿Cuántas cabezas de chavales necesitáis para que yo no tenga que dimitir? ¿Cuánta sangre necesitáis? Para eso sirven casos como los de Rubiales. Para instaurar el terror. Para mostrar ejemplaridad.
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Hay quien piensa que no hay problema en que el gobierno, o Google (si es que al final hay alguna diferencia), lo sepa todo sobre nosotros. Dónde estamos, con quién hablamos, qué hablamos. El que hace todo dentro de la ley, se piensa alguno, no tiene nada que temer. Pero la cosa no es tan sencilla. Para empezar, no sólo lo que está fuera de la ley se persigue y es represaliado. Desde luego la ley cada vez abarca más cosas y deja menos asuntos fuera, pero es que aparte de las represalias legales están las represalias sociales, mediáticas y económicas. Quien renuncia a su derecho a la intimidad pensando que todo lo que hace siempre es legal y moral no es consciente de que se le va medir por la legalidad y la moralidad del gobierno, no por la suya, y que esa legalidad hoy puede llegar hasta aquí y mañana hasta allí, que hoy puede ser blanco y mañana negro, que hoy puede coincidir con la de uno y mañana convertirse en objeto de persecución.
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Pero es que además la democracia es que la gente y los medios vigilen al gobierno, no que el gobierno y los medios (al servicio de los políticos) vigilen a la gente. Vigilar a la gente es lo normal que pasa en todas las dictaduras, la tendencia natural de todo gobierno, el pequeño milagro es que la gente vigile a los gobernantes y nos estamos cargando ese pequeño milagro. Por no mencionar que perder la capacidad de controlar al gobierno es muy fácil, mientras que recuperarla puede costar sangre, sudor y lágrimas. En circunstancias normales ya diríamos que siempre hay que estar vigilantes, pero es que los derechos individuales están siendo pulverizados a diario en España sin la menor sutileza, con una bola de demolición. Cuando el gobierno se sabe tan impune que no necesita ni disimular es que el camino a la dictadura está ya lo menos en fase dos.
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Un comentario
Lo del chat de los estudiantes riojanos estaba tan preparado por la mafia del gobierno que hasta ha sido denunciado una entrada ilegal en el grupo de chat para manipular las conversaciones antes de su denuncia.
Y la LOPD ha frenado a algunos de los acusadores públicos, al estar denunciados previsiblemente por infringir dicha Ley. Ahora toca el montaje de «le tocan el culo y la cabeza a una reportera de …Cuatro». Y cuando acabe eso, ya montarán algo para distraer a la gente.
Mientras tanto, la dictadura de la Agenda 2030 avanza a pasos agigantados.