El Parlamento de Cataluña votará el jueves elaborar una ley de referéndum de independencia. ¿Pero no había conseguido Sánchez rebajar el suflé independentista? ¿Pero no se justificaban todas las medidas adoptadas dentro o fuera de la Constitución en haber dado carpetazo de una vez al conflicto en Cataluña? Pues resulta que no sólo el efecto burundanga de la amnistía le ha durado poco al nacionalismo, sino que ya están preparando una nueva consulta para la ruptura sin haberse aprobado todavía siquiera la amnistía.
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— ABC.es (@abc_es) November 7, 2023
Los dirigentes socialistas son unos habituales practicantes de la teoría de que el fin justifica los medios, una teoría que ha dando amparo a todos los extremos, desde el GAL a la amnistía. En ambos casos el desenlace va a ser el mismo, que la moral y las leyes se desbordan bajo la justificación de unos resultados que además no van a producirse. Todos los efectos negativos de desbordar la ley y la moral van a ser reales, pero los supuestos efectos negativos van a ser ilusorios y evanescentes.
Guillermo Fesser en referencia a la amnistía: “Estoy a favor de cualquier medida que nos haga la convivencia más fácil, da igual si es legal, ilegal o alegal”.
En realidad, está a favor de lo que sea con tal de que la derecha no llegue nunca a gobernar.pic.twitter.com/JjGyEZKg4V
— Pedro Otamendi (@PedroOtamendi) November 6, 2023
Para facilitar la convivencia se nos dice ahora que lo mejor, en vez de las leyes, es abrazar las ideas del matón del barrio y pagarle por dejarnos respirar. Es lo que la izquierda abertzale ha practicado durante años. La paz era tan sencilla como pagar el precio que la izquierda abertzale exigía a cambio de la paz. El que no quería pagar un precio por la paz a los abertzales era un enemigo de la paz. Hablando de abertzales, Otegui no está apoyando a Sánchez porque sus acuerdos refuercen la convivencia, la unión y la fraternidad entre españoles. Todo lo contrario, Otegui, Junqueras o Puigdemont apoyan a Sánchez porque sus acuerdos dinamitan esa unión y contribuyen a la consecución de sus objetivos. Pretender que Otegui y Puigdemont están pactando con el PSOE para reforzar la unidad de España y la convivencia no es bordear la frontera de la estulticia sino asaltar su capital.
Cándido Méndez, otro facha en 3,2,1… pic.twitter.com/5EB3KBvqe1
— Pedro Pineda Celis (@pedropcelis) November 6, 2023
En otro tiempo lo que pudieran decir Felipe González, Alfonso Guerra o Cándido Méndez hubiera resultado significativo, pero ahora ya no lo es. Su influencia resulta insignificante y el PSOE es un partido absolutamente radicalizado, mucho más cercano al partido antidemócrata, violento y prosoviético de los años 30 (y por tanto a Otegui) que al PSOE de la Transición.
El PSOE, trabajando por la convivcencia y la concordia en España desde 1933 pic.twitter.com/VoswA1kr3A
— Adolfo (@adolfopamplona) November 6, 2023
El problema del PSOE es que no está traicionando su trayectoria sino, por el contrario, volviendo a los orígenes, porque esos son los orígenes. Y esta es la clave seguramente del problema de fondo de la política española, que la Transición a la democracia no ha pasado por los partidos de izquierda, de lo que es buen exponente el hecho de que conserven sus siglas desde los años 30. Los partidos de la derecha llevaron a cabo una refundación democrática que todavía sigue pendiente en la izquierda. Por eso la izquierda puede pactar con Otegui, los chavistas ibéricos, los nostálgicos de la URSS o Puigdemont pero no con la derecha, porque la línea divisoria no es entre quienes defienden España y quienes la atacan, o entre quienes defienden la libertad y quienes la atacan, sino entre izquierda y derecha, y sobre todo entre quien te puede proporcionar el poder a cualquier precio y quien democráticamente te lo disputa.
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Un comentario
A ver, a ver, a ver…el PSOE es un partido que no tiene ideología, hay que gobernar a cualquier precio y eso lo haría también el PSOE azul cómo ya lo demostró Aznar pactando con Pujol echando a Alejo Vidal Cuadras del PP de Cataluña.
Lo que ojalá estemos viendo es el final del régimen del 78 pero ya lo veremos