«En este momento no podemos saber si el texto de la Mano de Irulegi está escrito en una lengua que es la antecesora directa del euskera actual o en una lengua que pudo tener relación genética con el euskera actual, que formara parte de la misma familia y que después se hubiera extendido; o que directamente se trata de una lengua que no tiene parentesco directo con el euskera. No lo podemos saber en este momento». Es una de las conclusiones principales que realiza Ekaitz Santacilia, director de la revista científica Fontes Linguae Vasconum, la revista sobre lingüística y filología vasca que publica el Gobierno de Navarra desde 1969.
🔴🔴Expertos ponen en duda que la inscripción de la Mano de Irulegi sea vascónica: "Es pronto para determinar el idioma en el que está escrita" 👇👇https://t.co/LYMIgzpPjl
— SER Navarra (@SERnavarra) January 9, 2024
¿Cómo se les queda el cuerpo? ¿Cómo se compadece esto con toda la fanfarria con la que se anunció, Chivite en primera fila, que la Mano de Irulegui era el Santo Grial del esukera? A toda la gente que se compró una camiseta o un colgante de la mano, ¿le van a devolver el dinero? ¿Quién va a compensar del ridículo público a todos los abertzales titulares de cuentas en las sociales que, en su ingenuidad, se pusieron la mano como foto de perfil para presumuir de su diferenciación y su vasqueidad? Muchos de ellos, a la vista de sus apellidos, no tenían otra cosa que la foto de la mano para tratar de ser homologados en su aberchalidad. Y resulta que a lo mejor de lo que estaban presumiendo sin querer era de su ibericidad.
X
x
Todo esto sin embargo no es algo que llegue completamente de nuevas. Ya en el primer momento hubo voces que se alzaron advirtiendo de las dudas del significado euskérico que se le estaba dando a la mano. Para muchos expertos la mano de Irulegui no parecía otra cosa que una tésera celtibérica, como muchas otras en Navarra y en toda España, escrita en celtibérico. Ahí están las fotos. Ahí está la hemeroteca. Lo que pasa es que para algunos era demasiado bueno como para no lanzarse sin reservas a creerlo. Que tampoco era nada de particular por otro lado. Con mano o sin mano, el euskera es una lengua peculiar y que parte de los navarros habla en parte de Navarra desde tiempo inmemorial.
No era sin embargo la primera, ni la segunda, ni la tercera vez que el nacionalismo se lanzaba en tromba sobre algún tipo de resto arqueológico que avalara desde el pasado sus postulados del presente. El problema es que con sospechosa frecuencia esos hallazgos se han revelado con el tiempo tan falsos como los postulados presentes que el nacionalismo intentaba cimentar con esos hallazgos, desde el escándalo de Iruña-Veleia hasta la Cueva de Zubialde pasando por el Canto de Altobíscar.
Iruña-Veleia: Juicio a un gran fraude arqueológico | Cultura | EL PAÍS https://t.co/LNNqk0UEnD
— Fernando Frias (@FerFrias) February 3, 2020
La diferencia acaso es que esta vez se implicaba hasta el cogote en el hallazgo Aranzadi, que no obstante a estas alturas viene ya tocada de otros asuntos como las webs de algunos ayuntamientos en las que los etarras aparecen como víctimas en vez de como verdugos. Aranzadi da la impresión de ser el intento de crear el nacionalismo científico. Lo que pasa es que es la función la que crea el órgano y el órgano se encuentra al servicio de la función para la que ha sido creado, o esa es la impresión aparente por lo menos. Toda la pompa y el significado que se le quiso dar en su día a este descubrimiento se vuelve ahora contra quienes se dieron una prisa excesiva en instrumentalizarlo. El resultado puede ser otro sonoro ridículo o la próxima creación del Partido Nacionalista Celtibérico.
x
X
Un comentario
Los nazis éuscaros no hacen más que inventar, copiando lo de sus primos lazis, con idéntico resultado, el ridículo. No quieren hacerse a la idea de que o todos ibéricos o vascones, o ninguno ni ibérico ni vascón. Sus ansias diferenciadoras siempre se estamparán contra la realidad.