Aunque sea desde la oposición, Uxue Barcos sigue estando igual de dispuesta a trabajar por el cambio: “y lo haremos en todos aquellos sitios en los que la incapacidad de algunos para responder a la voluntad popular lleve a Nafarroa Bai a las oposiciones”. Eso sí, cambio tal y como ella lo entiende, puesto que cambio ya ha habido (que se lo pregunten a Miguel Sanz) desde el mismo momento en que UPN y CDN han perdido la mayoría absoluta y están obligados a gobernar en minoría o pactar con el PSN. Lástima que la parcela de voluntad popular que representa la coalición de la aguerrida candidata nacionalista, caso de ir a la oposición, sería sólo del 23% de los votos. Un porcentaje muy respetable, pero que ni es la mayoría ni es “la voluntad popular”.