Teniendo en cuenta que cada aborto cuesta unos 400 euros de media y que el número de abortos en Navarra ha crecido hasta los 855 al año, fácilmente se deduce que el negocio de eliminar a los niños indeseados alcanza ya un volumen de unos 385.000 euros. ¿Qué pueden significar las vidas de 855 niños indeseados frente a semejantes beneficios? Existe una famosa escena en la película El Tercer Hombre en la que Orson Welles, en el papel de traficante sin escrúpulos que en la Viena destruida tras la Segunda Guerra Mundial vende en el mercado negro medicinas en mal estado, observa a las personas desde lo alto de una noria como insignificantes puntitos bajo su vista, mientras le expone a un escandalizado Joseph Cotten la siguiente reflexión:
“¿Víctimas? No seas melodramático. Mira ahí abajo. ¿Sentirías compasión por alguno de esos puntitos negros si dejara de moverse? Si te ofreciera 20.000 dólares por cada puntito que se parara, ¿me dirías que me guardase mi dinero o empezarías a calcular los puntitos que serías capaz de parar?”.
Pues bien, la doctrina progresista ha convencido a buena parte de la sociedad de que los niños no deseados son unos meros puntitos negros, despersonalizándolos de modo que se pueden eliminar sin ningún reparo moral. No es que haya más abortos a pesar de que el gobierno ofrezca más información sobre los embarazos no deseados, es que esa información consiste en decir que los niños no deseados son sólo molestos puntitos en vez de seres humanos. La consecuencia lógica es que cada vez hay más personas dispuestas a eliminar esos meros puntitos y naturalmente también a sacar un jugoso beneficio de ello. Como sociedad nos define bastante que este tipo de cosas no nos quiten el sueño. ¿Razones para estar en contra del aborto? Seguro que hay más pero tenemos muchas, mire a ver si le convence alguna:
Porque estamos a favor de respetar la vida de los seres humanos
Porque pensamos que la vida humana comienza con la concepción
Porque los niños, definitivamente, no caen del cielo.
Porque usted puede estar en contra del aborto y también en contra de Aznar, en contra de la Guerra de Iraq, en contra de la congelación de las pensiones, en contra de la banca, en contra de la Constitución, en contra de ir a misa, en contra de la unidad de España… Estar en contra de todas estas cosas, por tanto, no es una excusa para estar a favor del aborto.
Porque antes de la concepción no comienza la vida, pero tras la concepción se inicia un proceso en el que no hay un punto en el que un segundo antes se pueda decir que no hay una vida humana y un segundo después que sí la hay.
Porque si hubiera un momento objetivo distinto de la concepción a partir del cual pudiera establecerse que empieza la vida humana, todos los partidarios del aborto y todas las leyes abortistas deberían coincidir exactamente en ese mismo plazo.
Porque retrocediendo en el tiempo, aunque usted ha cambiado mucho, no encontramos ni un momento de su vida en el que usted no fuera un ser humano… desde que fue concebido: el momento en que se puso en marcha lo que es usted ahora mismo.
Porque hemos visto una ecografía, y lo que aparece en la imagen es un niño.
Porque hemos visto el cuerpo desmembrado de un niño en las imágenes de un aborto, y no nos podemos negar a creer lo que han visto nuestros ojos.
Porque a las 8 semanas ya podemos saber si es niño o niña, y aunque traten de decirnos que no se sabe de qué especie, las hembras de la especie humana sólo tienen hijos de la especie humana. Y creemos en el derecho a la vida de los niños de la especie humana.
Porque si no sabemos el sexo antes, igual que muchas otras características del niño, probablemente es sólo porque carecemos de la tecnología necesaria para saberlo antes. Lo que sí sabemos es que cada vez sabemos antes las características del niño.
Porque la mitad de los niños abortados, estadísticamente, objetivamente sabemos que son niñas, con lo que difícilmente el aborto es un derecho de la mujer.
Porque la ley es incoherente, puesto que si abortar no es acabar con una vida humana en la semana 22, entonces no se entiende que exista un primer plazo hasta las 14 semanas. Y si abortar a partir de las 14 semanas es acabar con una vida humana, entonces no se entiende que un segundo supuesto permita abortar hasta las 22.
Porque si la ley actual sólo permite abortar hasta las 22 semanas, supone reconocer que todos los abortos posteriores a las 22 semanas que se han venido practicando a lo largo de los últimos años fueron asesinatos. O bien que el plazo de 22 semanas es un plazo completamente arbitrario.
Porque el derecho a la vida no puede depender de un plazo arbitrario.
Porque nacer no es más que pasar al bebé de un lado a otro de la tripa de una mujer. El niño no experimenta una mutación ni se convierte de repente en humano en el instante de nacer. No cambia lo que es, sólo el sitio en donde estaba.
Porque si depender de los padres anulara el derecho a la vida de los seres humanos, también podría matarse a los bebés o a los niños de 2 años. Algunos seres humanos, incluso, no tendrían derecho a la vida hasta los 35 años.
Porque si unos niños nacen a las 21 semanas, otros a los 7 meses, otros a los 9, y otros más perezosos incluso a los 9 meses y algunas semanas, entonces es absurdo pretender que el nacimiento marque el inicio de la vida humana. Todos ellos tienen derecho a la vida aunque hayan nacido en un plazo completamente distinto y con un grado muy distinto de desarrollo.
Porque la supervivencia de un niño prematuro no marca el instante en que se convierte en humano, sino el nivel de desarrollo tecnológico de las incubadoras, que cada vez van acortando el plazo.
Porque no aceptamos que el estado pueda establecer un plazo arbitrario antes del cual se pueda matar libremente a seres humanos. El derecho a la vida es un derecho humano, no una concesión graciosa del estado.
Porque hay padres que tienden a pensar que su hijo es un ser humano cuando desean tenerlo, pero que no lo es cuando no lo desean, lo cual es puro subjetivismo.
Porque si no respetamos la vida humana antes de la semana 9, 14, 22 ó 27… ¿por qué razón habríamos de respetarla después de la semana 9, 14, 22 ó 27?
Porque pretender que la vida humana depende de las semanas que tiene un niño es pretender medir la vida humana en días. Sería lo mismo intentar medir el derecho a la vida en kilos o en centímetros.
Porque si abortar es eliminar una vida humana, no podemos aceptar que cada cual decida si elimina o respeta otra vida humana.
Porque nunca volverá a existir un niño como ése que ha sido abortado.
15 respuestas
Lo que tiene que hacer la progresía es contarnos la.verdadera causa ppr la que están a favor del aborto. Aparte de lucro personal, si piensan como una determinada organización mundial, muy ordenada ella, que los seres humanos sobre la tierra no debemos alcanzar más allá de 500 millones…que lo digan. Y que digan TODOS los métodos que piensan usar para alcanzar tal cifra…
Y que no nos hagan comulgar con ruedas de molino de nosequé libertades de la mujer…cuando callan con el velo y lo todo que hay detrás.
El principal motivo para estar en contra del aborto es estar a favor de la vida, no permitir la muerte de niños inocentes. ¿Por qué entonces el señor Gallardón pretende permitir un supuesto para abortar, que es el daño psicológico para la madre? ¿Si la madre corre riesgo de daño psicológico, entonces no se está matando a un niño? Tengo los mismos reparos con la ley de plazos del partido socialista, porque no entiendo los supuestos en caso de aborto: o se permite, o no se permite; o estamos matando niños o no los estamos matando (porque se considera que no hay vida y entonces no hay supuestos que valgan). En segundo lugar, si estamos a favor de la vida, pues favorezcámosla en todos sus matices: bebés que están por nacer, ancianos y personas dependientes, pobreza infantil, parados que no pueden sacar adelante a sus familias, favorezcamos la salud pública… En cuanto a negocios en torno al aborto, toda la vida han existido. La cuestión es si se consideran legales, ilegales o alegales.
Lo que tiene que hacer el conservadurismo español en general, y navarro en particular, es buscar un champú anticaspa que le vaya bien, le libere de su rancio puritanismo y consiga abandonar su adicción a husmear en los genitales del prójimo.
A ver cuando el conservadurismo nos cuenta por qué ahora considera que un feto es un niño cuando hasta hace cuatro días no lo hacía.
Y a ver cuando se da cuenta que elevar el aborto a la categoría de asesinato es un disparate de tal calibre que sólo los cegados por la religión pueden aceptar sin ruborizarse.
Estimado Librestador:
He leído con atención su contribución, y me permito añadir algunas precisiones:
Primera. Juramento hipocrático (s. V a. C)
“No accederé a pretensiones que busquen la administración de venenos, ni sugeriré a nadie cosa semejante; me abstendré de aplicar a las mujeres pesarios abortivos. Pasaré mi vida y ejerceré mi profesión con inocencia y pureza. No ejecutaré la talla, dejando tal operación a los que se dedican a practicarla. En cualquier casa donde entre, no llevaré otro objetivo que el bien de los enfermos; me libraré de cometer voluntariamente faltas injuriosas o acciones corruptoras y evitaré sobre todo la seducción de mujeres u hombres, libres o esclavos. Guardaré secreto sobre lo que oiga y vea en la sociedad por razón de mi ejercicio y que no sea indispensable divulgar, sea o no del dominio de mi profesión, considerando como un deber el ser discreto en tales casos” (extracto)
No, pero esto no puede ser. Que en Navarra no se practican abortos ¿no?. Los chicos de UPN que son muy meapilas siempre lo han evitado. ¿O no?.
Como puede observar, el renombrado galeno ya decía hace 26 siglos que el médico honesto debe evitar el aborto. NO se puede acusar a este pensador de “conservadurismo” so pena de forzar la historia de la ideas a un esquema (este sí trasnochado) dialéctico, atractivo, sí, pero simplista también….mal que le pese a algunos la división de los hombres entre progresistas y con conservadores, izquierdas y derechas, buenos y malos, es una reducción que no da razón de la realidad.
NO es difícil en nuestro terruño hispano, encontrar próceres del que usted denomina “conservadurismo” que apoyan el aborto libre y gratuito (¿le suena Celia Villalobos?y ¿Ana Pastor?) y otros insignes representantes de la denominada “progresía” que desaprueban el aborto (V. Gr:Àngel Ros, alcalde de Lleida del PSC, Francisco Vázquez,…)
En fin, la historia, querido Librestador, se ha encargado de demostrar que la utopía hegeliana, que parece que usted comparte, es eso, una utopía.
Que sí, que sí, D. Libretestador que nos da mucho miedito con sus voces sobre genitales, curas y cruces (uuuh cómo tiemblo, no me llame facha porfa, perdóneme la vida).
Pero de verdad, a su edad ¿aún no es capaz de pillar la diferencia entre los genitales y lo otro? desde que usted era un embrión hasta el día de hoy, cuando escribe en NC, ¿en qué momento dejó de tener vida humana?
Gracias.
Estoy ansioso por saber, cuantos puntitos negros sería capaz de parar Librestador a 20.000 dólares cada uno.
Estimado Ulpiano:
Muy interesantes sus observaciones hegelianas pero creo que se ha confundido y se dirige a mí cuando en realidad debería dirigirse a Ciudadano Caña, él es quien ha puesto sobre la mesa la “utopía hegeliana” al hablar de progresía pro abortista, yo me he limitado a utilizar, formalmente y a contrario sensu, su planteamiento.
Pero no se puede negar que mayoritariamente la derecha / el conservadurismo, es antiabortista y la izquierda / el progresismo, es proabortista. Hay versos sueltos en todas partes (yo soy uno de ellos) pero a granes rasgos es así.
Y entrando al meollo del asunto. Siempre me ha llamado la atención que en esa parrafada Hipócrates hable expresamente de pesarios abortivos pero no del aborto en sí mismo. Digo esto porque hay otra cita del renombrado galeno que va en la dirección contraria: “Conviene tomar baños calientes, dormir sobre algo blando, embriagarse una o dos veces de cuando en cuando, entregarse al coito allí donde se presente la ocasión”. Y digo contraria porque los actuales antiabortistas proponen la abstinencia cómo solución a “su” problema.
Apreciado Librestador:
Lo juegos de palabras nunca ha sido un arte en el que destaque. Pero que usted debe ser un maestro consumado. Debería recibir algunas clases suyas.
Sea como fuere, permítame añadir como en los países de nuestro entorno cultural ha habido y hay partidos que entran en su categoría de “conservadurismo” que han aplaudido hasta con las orejas (discúlpeme la figura literaria si no es excesivamente académica) el aborto libre, gratuito y universal. El partido conservador inglés (fíjese bien el nombre del mismo), incluida la reconocida Margaret tacher es firme partidario del aborto….bueno casi todos, hay algún diputado católica disidente. Podriampos hablar de la CDU alemanda, o la UMP francesa, por mentar solo algunos ejemplos.
Si me permite ahondar en mi querido Hegel, seguro que recuerda que de él derivo la denominada izquierda hegeliana (Feurbach, Engels, Marx, Bakunin…) de amargos frutos, y la derecha Hegeliana, que llego a Nietzche y al nazismo. Ya se ve que ejemplos de perspectiva dialéctica la puede encontrar usted por doquier. Y, si, ciertamente, a Ciudadano Caña cae esa postura, no lo haga usted, aunque sea a efectos meramente dialécticos, no me vaya a ser a hora un sofista.
No se me.dejen llevar.por.la.primera impresión de la.banderita que lleva mi avatr. Yo de Hegeliano no tengo nada de nada. De anarcocapitalista cada vez más…
En mi opinión no hace falta filosofar sobre este tema: ni Hegel, ni Freud ni la madre que los trajo a todos (y que por cierto, no abortó).
No hay que remontarse a los griegos, sino que leyendo incluso la Convención de Ginebra, una versión moderna y un tanto descafenidada del juramento hipocrático, que dice “Tendré absoluto respeto por la vida humana” seguro que entienden mi opinión: todo personal sanitario (médicos, matronas, enfermeras) que colaboran en la práctica de un aborto (o de una eutanasia) saca los pies del plato, trasgrede los límites. Se transforma en un asesino a sueldo, en un mercenario sin más.
Ya ve Ulpiano, tiene que salir al extranjero para encontrar políticos proabortistas de peso en el lado conservador. Añado a la lista: el aborto se legalizó en Francia en tiempos de Pompidou, Nixon nombró al juez del tribunal supremo que inclinó la balanza del lado abortista en la famosa sentencia Roe vs Wade, 5 años antes Ronald Reagan legalizó el aborto en California, estado del que era gobernador, más tarde, en su carrera a la casa blanca, contó una milonga para contentar al sector republicano más puritano.
En las actuales primarias los republicanos han tenido que hacer encaje de bolillos para que saliese elegido el candidato más moderado (Romney apoyó el aborto siendo gobernador de Massachusets pero ahora dice lo que Reagan en su momento) y evitar el desastre de hace 4 años con Sara Palin, y es que en EEUU no se puede llegar a la Casa Blanca siendo antiabortista.
¿Cuando se va a homologar nuestra derecha a la derecha internacional? ¿Cuando va a perder el pelo de la pradera? ¿Cuando va a encontrar el champú anticaspa definitivo?
Se lo oí directamente a Clinton. Increíble. Iba a ver a Juan Pablo II y le preguntaron si hablarían sobre su política abortista. Respondió: “For the US it’s vital that Latinamerican women had less children”.
Pero no nos engañemos; el Gandhi que nos hace falta -acaso-, digo el de la resistencia pasiva, también tiene que hacernos resistir a que hasta el último mono se haya acostumbrado a convivir con la matanza del aborto como algo habitual. No sólo abortan las ricas.
Si fuera cura, tocaría a muerto todos los días, a ver si se enteran.
¿Llegarán a aconsejarnos los de la Unión Europea que -además- tengamos menos hijos y matemos a los viejos para ahorrar gasto de la SS (por medio de las SS) y pensiones?
Esto no tiene más solución que la de un injerto de Pablo y Gandhi: dar bien por mal y resistencia pasiva. Lo primero, también.
A la atención de librestador:
El ex embajador de España ante la Santa Sede, Francisco Vázquez, pregonero del Domund 2012. Durante su estancia en Roma acogió un encuentro de misioneros españoles
Se lo digo, por que a lo mejor le sirve para re-plantearse su pensamiento. Le adjunto los datos, por si tiene ocasión de asistir:
El pregón tendrá lugar en la catedral de La Almudena y monseñor Fidel Herráez, obispo auxiliar de Madrid, acompañará a Vázquez. Será el lunes 15 de octubre, a las 19.30.
Espero que Francisco Vázquez no me lo tache ahora como extranjero…