Era imposible que no hubiera acuerdo. Si una de las partes traga con todo y lleva de emisario a Cerdán para asegurarse de que no se escapa ni una migaja del plato, es imposible que no haya acuerdo. De hecho le dijeron a Cerdán: no vuelvas sin un acuerdo. O sea que volvía con un acuerdo o se quedaba allí para siempre en Waterlooo tomando coles con Puigdemont. Tampoco es que sea complicado cerrar un acuerdo cuando las instrucciones son “sí a todo”. Hasta Cerdán puede hacerlo. Y aún le sobra tiempo para tuitear a don Santos llamando fascista a todo pichichi que cuestiona el acuerdo. Cerdán el conciliador armonioso lleva años llamando fascistas a todos los que osan criticar el sanchismo.
#LaVOXdesuamo Casado y Rivera compitiendo con VOX por ver quién es más FASCISTA, estos patriotas de pacotilla deberían lavarse la boca con lejía antes de hablar de Pedro Sánchez y de el Gobierno
— Santos Cerdán León (@santicl) February 6, 2019
¿Por qué Cerdán tiene esa facilidad para llamar fascista a todo el que no está con el PSOE e indignarse tanto con una foto como la de Colón? La respuesta es evidente. Porque las fotos de Cerdán son con la izquierda abertzale y con los golpistas, con prófugos de la Justicia y con personajes que llaman presos políticos a los asesinos de sus propios compañeros. Para justificar sus propias fotos, Cerdán tiene que convertir en nazis a todos los que se oponen a sus pactos.
La ultraderecha con sus actos, y el PP con su complicidad, son los responsables de un ataque no solo contra el @PSOE, sino contra la Constitución y la Democracia.
Hoy más que nunca, convivencia, progreso y fuerza socialista para avanzar.
🌹 @sanchezcastejon a la militancia: pic.twitter.com/323JuaILAj
— Santos Cerdán León (@santicl) November 8, 2023
La ironía se cuenta sola. Cerdán llama fascistas a los que apoyan las manifestaciones en Ferraz mientras pacta la amnistía de los que quemaron Barcelona. Cerdán no reconocería a un ultra atacando la Constitución española y el estado de derecho ni aunque estuviera firmando con él un pacto de gobierno. Hemos perdido a un reparador de frigoríficos del montón para añadir una cabeza escacharrada más al sanchismo.
Duele ver cómo la policía de Marlaska expulsa a los manifestantes de Ferraz: "Si os decimos que os vayáis o vais".
La gente, consciente de que protestan para frenar un golpe a la democracia, les dice "¿qué hacéis? Nosotros somos los que siempre os apoyamos".
Y les aplauden. pic.twitter.com/wpSAM8nqaw— Capitán General de los Tercios (@capTercio) November 9, 2023
En el día de ayer se produjeron escenas inusitadas en las concentraciones frente a las sedes socialistas, con los propios concentrados expulsando de la concentración a los violentos infiltrados, o manifestantes pacíficos aplaudiendo a la policía que les impedía manifestarse y les expulsaba de las calles.
Los manifestantes pacíficos arrinconan y expulsan a los violentos en Ferraz. No puedo estar más orgullosa de vosotros. Sois los mejores 🇪🇸 https://t.co/nkZRk7Ds9Q
— Teresa Gómez (@teresagomezgp) November 8, 2023
¿Se imaginan que Abascal o Feijóo, tras los incidentes de anteayer, le hubieran pedido a los falangistas de la niña nazi “apretad”? El problema es que haga lo que haga la derecha la izquierda siempre la va a calificar de fascista. El modelo es ya el de la izquierda abertzale, el de ETA. Tienes que llamar fascista a una persona para justificar todo lo que le vas a hacer y toda la violencia que vas a ejercer sobre ella. Horas antes de gasearlos, Patxi López calificó de nazi el comportamiento de los manifestantes. Claro que es legítimo manifestarse en este país, siempre que sea a favor de Sánchez, o de los presos. La forma de vender tu totalitarismo es llamar fascistas a aquellos sobre quienes vas a ejercerlo. Para vender la amnistía, el reconocimiento nacional de Cataluña, la consulta, la condonación de la deuda o la impunidad de los corruptos el dilema que tienes que presentar es que ES ESTO O EL FASCISMO. Eso es lo que no entiende Feijóo, que haga lo que haga la izquierda siempre le va a tildar de fascista y colaborador de los fascistas. Feijóo es el freno de mano de la derecha porque busca más la aprobación de la izquierda que su derrota, no es capaz de desbordar su marco mental y no se le puede ganar a la izquierda jugando en su marco mental.
🔴 ÚLTIMA HORA | Felipe González: «Si quieren una amnistía, que la consulten con los españoles». https://t.co/4Z3ININZbf
— THE OBJECTIVE (@TheObjective_es) November 8, 2023
El pacto de investidura con los golpistas puede tener un reverso no menos preocupante que el propio acuerdo con los golpistas que es la forma en que ahora el PSOE y Sumar intenten vender esto como una alianza progresista. Es de temer que para revestir de izquierdista la naturaleza soberanista de la investidura de Sánchez ahora el PSOE abrace las propuestas más radicales, disparatadas y bolivarianas de Sumar. Será la forma de endulzar a las bases ultraizquierdistas el pacto con Puigdemont.
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Un comentario
Y sinceramente. ¿Es peor ser «fascista» que «comunista»?
¿Es peor la swastica que la hoz y el martillo?
¿En que contexto histórico se basan para ello?
Querría que me lo explicaran.