La nueva Ley de Policía de Navarra, al margen de otros asuntos polémicos ya conocidos, de cara a su aprobación definitiva incluye otros no por menos debatidos menos discutibles. Por ejemplo, ya existe un cierto consenso (que garantiza la futura aprobación) en que no exista una estatura mínima para ser policía. También es posible que se acabe elevando el límite de edad para entrar en la policía. El PSN propone incluso que el límite sea la edad de jubilación. En este momento los requisitos para ser policía ya son diferentes entre hombres y mujeres y cerca de un 10% de los policías forales son mujeres. Cae de la ley la idea de pagar a los policías por superar periódicamente unas pruebas que garanticen una forma física mínima.
Todas las medidas anteriores, tanto las que se caen como las que se van a incluir en la nueva ley o se pueden incluir, llama la atención que se encuentren caracterizadas por una misma orientación: la de facilitar el acceso universal de la población a la policía, sin distinción de sexo, edad ni condición física. La pregunta es si al hacer esto nos estamos olvidando de la característica fundamental de la policía, que es el uso de la violencia legítima del estado. Sí, hemos dicho violencia.
Obviamente la policía también puede bajar un gatito de un árbol o llevar a una persona que se ha perdido a su casa. Pero eso también lo pueden hacer otros cuerpos de funcionarios o particulares y no es la nota distintiva y característica de la policía, que es la capacidad de utilizar en un momento dado la fuerza física. Obviamente esto no significa que la policía, como a otro nivel el ejército, tenga que utilizar como única o principal herramienta la fuerza física. Pero o sirve para utilizarla eficazmente si hace falta, o la policía no sirve para nada. O para nada que no pudiera hacerse mediante psicólogos, boy scouts o funcionarios que no fueran policías.
Si ponemos esta cualidad que es la esencial, el uso de la violencia, en el centro de la actividad policial y los requisitos que por tanto han de reunir los aspirantes a policía, salta a la vista que es un error despreciar datos como la fuerza y forma física, la edad, el sexo o la estatura. Los policías no sólo tienen que ser buenos en eso, pero al menos tienen que ser buenos en eso, particularmente porque eso es aquello para lo que son esenciales. Otra cosa es perder el tiempo y tirar el dinero.
En este sentido, ¿qué pasa si no existe una selección de los candidatos que excluya a aquellos sin un mínimo nivel físico? Pues que para detener a una persona, en vez de una patrulla pueden hacer falta dos, o tres, con la multiplicación de costes que ello supone para el contribuyente.
Es más, una cierta presencia física de la policía puede de hecho rebajar el nivel de violencia necesaria por parte del estado. Por un lado porque una cierta capacidad de intimidación física tiene carácter disuasorio, cosa que no se consigue con policías bajitos y enclenques. Por otra parte porque, si llegado el caso hay que utilizar la fuerza, los medios y la cantidad de fuerza que tengan que aplicar varios policías enclenques para detener a una persona violenta puede ser mucho mayor que la que tendrían que utilizar otros policías con mayor capacidad física. Naturalmente puede que de hecho ya se realice en la práctica una selección como la que se viene a proponer aquí; pero entonces, ¿a qué fingir?
Tampoco tiene mucho sentido que haya que pagar un extra a los policías por mantener una forma física mínimamente digna, cuestión que debería ir implícita en el puesto. Más sentido tendría, en todo caso, penalizar a los policías que no alcanzaran un mínimo en una serie de pruebas periódicas. Lo políticamente correcto acaba desnaturalizando las instituciones, inutilizándolas para sus fines y encareciéndolas hasta hacerlas insostenibles. La policía no es una excepción a este principio. Y eso que en este pequeño análisis no hemos introducido la posibilidad, no descartable, de que el consejero de Interior o el alcalde y las personas a las que la policía tuviera que perseguir fueran del mismo equipo. Claro que eso siempre se puede solucionar con más cuerpos policiales, más personal, más estructura y más gasto.
16 respuestas
Pongamos algo de información:
Yo lo poco que se es lo siguiente, en el tema de GC y PN, en general todos los que trabajan destinados actualmente en Navarra y Pais Vasco cobran un plus de peligrosidad, y disfrutan de mas días de vacaciones por estar en estos destinos que los del resto de España (entre 500-600€ al mes, si me equivoco que me rectifiquen).
El venirse a Navarra o Pais Vasco durante un mínimo de 3 años además les pone en cabeza de cambio de destino y de especialidad.
Es principalmente este último el factor que les hace decantarse venirse a estos destinos.
Un GC puede pertenecer a ISFAS y tener sanidad privada o la SS, segun elija. Un PN tiene MUFACE y al igual que el anterior puede elegir anualmente sanidad publica o privada.
Los GC siempre han podido disfrutar de Casas Cuartel, lo que implica, que si disponen de una, eso que dejan de pagar (pagan gastos comunes y propios). En algunos lugares tienen incluso sus propios economatos y servicios propios a bajo precio, aunque cada vez menos.
En tema de Vacaciones tiene acceso a residencias militares, pagando precios irrisorios, debido a la situación de cuarteles y casa cuartel en casi toda la geografía española.
Eso sí, de arriba se aprovechan de los GC debido a su condición de cuerpo Militar, y a expensas de mandos que muchas veces han ascendido debido a las famosas “rodilleras” y no por su valía (típico de cualquier empresa de este pais).
Yo pienso que de cualquier forma si están mal pagados, y que deberían cobrar mucho más, ya que al final tienen que hacer el trabajo sucio para los de arriba.
En relación a PF, se cobran, efectivamente además del salario base, el complemento especifico y el del puesto de trabajo, pero presupone que todo el mundo de PF trabaja en noches y en días festivos cosa que no es cierta, aunque el grueso (Seguridad Ciudadana y Tráfico sí lo hacen).
La productividad no existe en PF (a diferencia de GC que en unidades como Tráfico estan obligados a hacer una numero X de denuncias y servicios baremados para sacar una complemento que estan entre los 100-200€, cosa que está dando mucho que hablar en la actualidad por su labor puramente recaudatoria ya que se prima con mas puntos una denuncia o un detenido que una ayuda en carretera). Esto que digo se puede consultar si no me cree en el DECRETO FORAL 1/2005, DE 10 DE ENERO, POR EL QUE SE APRUEBA EL REGLAMENTO DE JORNADAS, HORARIOS Y RÉGIMEN RETRIBUTIVO DE LOS MIEMBROS DEL CUERPO DE LA POLICÍA FORAL DE NAVARRA.
Un PF no recibe ninguna ayuda por desplazamiento (también puede mirarlo en el Decreto presentado). Existe una partida que implica que si el traslado es forzoso (o sea obligatorio quiera o no el funcionario), si aceptara voluntariamente no se le pagaría. Un PF residente en Tudela pero con destino en Elizondo, no recibe ni un Euro, por kilometraje, tiempo de desplazamiento o desgaste de automovil a menos que esté allí forzosamente (coas que no ocurre nunca).
Hasta el año 91-93 que los funcionarios navarros entraban en el colectivo del Montepio, todos los posteriores o sea un 80% pertenecen y cotizan a la SS. Nada de Sanidad privada.
No se como es la nueva Comisaría en Elizondo, y seguramente los del Helipuerto sobra, pero también hay que decir que la antigua era de vergüenza y si no pregunte, su tamaño, su localización y los problemas que había de vestuario.
Se que mis datos no van a quitar la ideas ya preconcebidas, pero lo que si es cierto es que si hay que comparar, comparemos en igualdad a nivel de Navarra, y no a Navarra con un pueblo en Andalucía.
Tampoco es correcto decir que la PF es algo inútil, absurdo o superfluo, hacen lo que pueden con los medios que tienen (coches en mal estado, material obsoleto y en mal estado, falta de chalecos…).
Navarra se descuenta del cupo con el Estado alrededor de unos 50 millones de Euros por la PF, de los cuales unos 35-36 se usan para la Policía Foral, pero del resto del dinero nada se sabe… ¿alguien tiene estos datos?…