El 7 de noviembre es un fecha teñida de sangre en la memoria histórica omitida y hasta prohibida por la izquierda. El 7 de noviembre de 1936 comenzaron las ejecuciones masivas de presos en Madrid y el 7 de noviembre de 1938 se produjo el bombardeo de Cabra, un suceso que empequeñece lo sucedido en Guernica aunque todo el mundo haya oído hablar del bombardeo de Guernica y casi nadie del de Cabra. Claro que mucha gente tampoco ha oído hablar nunca de las matanzas de Paracuellos. Curioso, en un país en el que tanta importancia se le da a la memoria histórica. Selectiva, por supuesto.
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Las matanzas de Paracuellos son probablemente la mayor masacre criminal de la Guerra Civil Española y sin duda la mayor cometida por la izquierda. En noviembre de 1937 los republicanos comienzan a ejecutar sistemáticamente a los presos políticos de las cárceles madrileñas. Los presos, incluyendo desde militares a religiosos, pasando por menores y desafectos de todo tipo, comenzaron a ser supuestamente trasladados para, por el contrario, ser ejecutados durante el trayecto en lo que se conocieron como “sacas” de presos, que se prolongaron durante semanas. Entre los miles de fusilados, desde el dramaturgo Pedro Muñoz Seca hasta Samuel Ruiz Navarro, un niño de 13 años. Igual que todo el mundo ha oído hablar del bombardeo de Guernica pero no del de Cabra, todo el mundo ha oído hablar del asesinato de García Lorca, pero no del de Muñoz Seca.
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Que la matanza genocida de la izquierda en Paracuellos durara semanas, incluso meses, dice bastante de la naturaleza de la misma. Es decir, no se trató de un hecho puntual, respecto al que las autoridades republicanas no pudieron hacer nada hasta después de conocerlo. Por el contrario, las matanzas eran vox populi y se formó un revuelo hasta internacional por la indignación ante lo que estaba sucediendo. No cabe por tanto alegar ignorancia. Por acción u omisión resulta incuestionable la responsabilidad en esas matanzas del gobierno republicano, el cual presidía el socialista Largo Caballero. Angel Galarza, el ministro de Justicia, también era socialista. En la ejecución material de las matanzas, además, se encontraban directamente implicadas las para entonces Juventudes Socialistas Unificadas del PCE y el PSOE. Santiago Carrillo, además de presidente las Juventudes, se encontraba a la cabeza de la Consejería de Orden Público. Resulta también impensable pensar que todo lo sucedido en Paracuellos pudo suceder sin su conocimiento, cuando no bajo sus órdenes. A tal punto eran conocidas por todos los madrileños las matanzas que a mediados de noviembre el cónsul honorario noruego Felix Schlayer, el doctor Georges Henny, delegado en Madrid del Comité Internacional de la Cruz Roja y Edgardo Pérez Quesada, encargado de negocios de la embajada argentina, se dedicaron a localizar y denunciar los lugares de las matanzas, dándose la curiosa circunstancia de que cuando el doctor Henny volaba a la sede de Cruz Roja en Suiza unos días después, en un avión correo de la embajada francesa, su avión por derribado por dos cazas republicanos.
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El papel del dirigente socialista Francisco Largo Caballero en la masacre de Paracuellos.
La matanza duró casi un mes, fue perpetrada siendo él presidente del gobierno y la dirigió un órgano delegado de ese gobierno. Y esto lo venden como 'incontrolados': https://t.co/QxscpyDHH5— Elentir 🇪🇸🇵🇱🇺🇦🇮🇱 (@elentirvigo) November 7, 2021
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En cuanto al bombardeo de Cabra, tuvo lugar el 7 de noviembre de 1938, justo dos años después del comienzo de las matanzas de Paracuellos. El bombardeo de Cabra es, literalmente, el Guernica del bando nacional. Fue un bombardeo totalmente alejado del frente, contra la población civil, sobre una población que no constituía un objetivo militar, con una cifra de muertos (hombres, mujeres y niños) similar a de Guernica, si no superior. Todo es semejante menos la repercusión histórica y propagandística que han tenido uno y otro bombardeo. Interesa no olvidar todo esto porque hasta ahora era algo de lo que se podía escribir, aunque casi nadie lo hiciera, mientras que entramos en una época en la que aunque mucha gente quisiera quizá ya no le vaya a estar permitido hacerlo.
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3 respuestas
Quien controla y domina el pasado desde el presente controla y domina el futuro
La izquierda provoca una guerra civil y son tan inútiles que la pierden teniendo a su alcance todos los recursos del Estados, y luego se pegan 80 años llorando y tapando los terribles crímenes que cometieron, con más de 100.000 asesinatos en retaguardia. Con los antecedentes del golpe de estado socialista de 1934 y a partir de febrero de 1936 nos podemos imaginar como habría sido la represión de la dictadura soviética que querían imponer los camaradas del Frente Popular liderados por el PSOE. Luego se quejan porque Franco fusiló a 20.000.
Pablo:
Franco no fusiló. Tras la victoria, los izquierdistas y separatistas presos fueron juzgados y algunos de ellos fueron ajusticiados por su vinculación con el terror.