¿Cuánto apostaría usted a que la educación en Finlandia es mejor que en Navarra?
Atravesamos en España, y particularmente en Navarra, una peculiar etapa de lo que podríamos calificar como «tremendismo político».
La gente se muere de hambre en la calle.
La sanidad pública es una catástrofe.
Las personas son masivamente desahuciadas.
La educación es un asco.
Y además esto sólo pasa en Navarra o en Navarra mucho más que en el resto de lugares de España.
Todo esto es lo que alguien podría pensar siguiendo el discurso de la oposición tremendista y la visión de algunos medios.
El equivalente en biología al tremendismo político sería afirmar que las pulgas en Navarra tienen el tamaño de un Renault Megane, por lo que casi todo lo que vemos, leemos o escuchamos deberíamos someterlo a un doble contraste con la realidad:
-¿Cuál es la magnitud real del problema del que hablamos? -¿Cuál es la situación de Navarra en comparación con los demás?
Para saber lo que uno mide realmente primero hace falta un metro.
Pero además, para saber si uno es alto o bajo, tiene que medirse con otros.
Por alguna extraña razón, parece que en este momento proponer algo así es hacer mal periodismo. Esto es así porque vivimos en el clímax del tremendismo político.
Ayer en la cuenta de Twitter de Podemos Navarra se publicaba un vídeo sobre la educación en Finlandia, acompañado del siguiente texto: «La educación en Finlandia menuda diferencía con la de #Navarra.«
Todo el mundo supone que la educación en Finlandia es la mejor del mundo.
Todo el mundo cree saber que la educación en Navarra es la más aborrecible.
A nadie se le escapa que pretender dudar de alguna de estas dos verdades absolutas es ser un fascista, un corrupto y cunetero.
A pesar de ello, si alguien consigue evitar el pensamiento tremendista y consultar el último Informe PISA, con lo que se encontrará es con un dato tumbativo: la educación concertada en Navarra obtiene mejores resultados que la educación pública de Finlandia.
¿Cómo es posible que creamos que la educación en Navarra es lo peor del mundo si estamos por encima de Finlandia?
¿Cómo es posible que la educación concertada navarra sea mejor que la pública de Finlandia y que en lo que esté pensando la oposición tremendista es en dinamitar algo que funciona tan bien?
¿O es que hay que dinamitar la educación concertada precisamente porque funciona bien? De hecho puede que el problema para dejar que los navarros elijan si quieren educación concertada o cuánta educación concertada quieren sea este, que la educación concertada navarra es muy buena y que si a la gente se le da libertad la gente la elije. Es por eso que hay que limitar la libertad de la gente para elegir la educación concertada.
Otro dato que no gustará al pensamiento tremendista: la educación en Navarra, tanto pública como concertada, es la peor de España… exceptuando a todas las demás.
Comparemos los datos PISA de Navarra con los de Andalucía y la CAV. Si Navarra se encuentra en «estado crítico», ¿cómo están los demás?
Alguien podría pensar que todo lo anterior es una racionalización que intenta justificar lo injustificable, perpetuar la corrupción, cerrar los ojos a la realidad, negar todos los errores cometidos, echar la culpa de todo a los vascos y a la ETA, justificar el franquismo, hacer ver que aquí no ha pasado nada y que no hay ningún problema, y que hay que elegir entre decir que todo va absolutamente perfecto o que todo es absolutamente desastroso, sin matiz alguno. Pues no, se trata simplemente de oponer un poco de pensamiento racional al tremendismo político y periodístico.
10 respuestas
Para loss podemitas, y en general, los progres en general, la educación concertada es mala y exterminable por varias razones:
1.- Permite algo de libertad a los padres, y eso es intolerable. El Estado debe decidir todos los resquicios de las hormigas.
2.- Da una educación mejor a un coste menor. Y eso tira por tierra la necesidad de una educación pública dirigida por el estado.
3.- Impide tener un montón de funcionarios que dependen de la mafia sindical para el tema de condiciones salariales y laborales. Cogidos por los…
4.- Impide también que el estado dirija por completo la formación y educación de nuestros hijos, para poder moldear sus cerebros desde pequeños, manipular sus mentes al milímetro, para conducirlos al redil mental del que nunca les dejarán salir.
Y encima se chulean.
Educación concertada = libertad de los padres, es una gran mentira porque en todo caso estaremos hablando de algunos padres que tienen la suerte de vivir en las mayores poblaciones y además tienen un nivel económico para pagar extraescolares a cutiplé,
¿Qué pueden elegir los padres de Roncal o Jaunsaras? ¿Y los que están en paro y tienen que hacer milagros para llegar a fin de mes?
Está claro el objetivo de algunos: buena educación para mis hijos, pagada en una buena parte por el estado, y a los demás que les den.
Hay mucha gente que añora la época franquista en la que la educación era para unos pocos y los demás ¿para qué estudiar? si había suficiente trabajo en el campo, la construcción o las canteras.
¡¡¡¡Ahora va a resultar que la realidad es fascista!!!
Fuera bromas les felicito por su agudeza y eso me recuerda un viejo lema izquierdista de que la verdad es revolucionaria aunque yo sigo prefiriendo lo de que la verdad os hará libres.
Don Luis MIguel, me temo que habla usted desde el prejuicio y con mala información. Afirmar que durante el franquismo la educación era para unos pocos… Quizás por juventud no sabrá usted que la mejor educación de ésa época a la que usted alude era precisamente la educación pública, que verdaderamente era una ascensor social, y los buenos maestros estaban en la pública al haber pasado el filtro de las oposiciones. La privada no gozaba de prestigio como ahora. Es ahora, cuando la calidad de lo público se ha tirado por los suelos, gracias a las políticas educativas progresistas, que lo privado está prestigiado. La única razón que explica que la educación concertada es algo superior a la media consiste, a mi juicio, en que los padres, de manera general, se preocupan de que sus hijos cumplan sus obligaciones académicas en casa, les ayudan en la medida que pueden, apoyan la labor del maestro y respetan su autoridad académica y no le cuestionan delante de los hijos y, si es necesario, cuando el maestro tiene que reprobar o castigar a los niños por comportamiento indebido, los padres en casa también les piden cuentas a los hijos y, si es necesario, les castigan también. Me temo que el éxito de la educación es mucho menos de dinero y mucho más de actitud y respeto, mérito y sacrificio, palabras que en el manual político-educativo progresista se han proscrito y olvidado. Así nos va.
Y para abundar en el tema, basta ver que unas asociaciones de padres se oponen a que sus hijos se sometan a unos exámenes pruebas oficiales en 3º de primaria por parte de la Administración educativa. Inexplicable. Usted ve a los niños constantemente compitiendo entre ellos en todo tipo de juegos o poniéndose a prueba y compitiendo contra sí mismos, forma parte de su naturaleza, forma parte de su crecimiento hacia la edad adulta. Y llegan los expertos educadores de ciertas asocaciones de padres, los mismo que dicen que la única educación posible es la pública, y manifiestan que tal cosa de someterse a unos exámenes es casi un delito. Y uno se queda estupefacto de la estulticia. En el futuro, sus niños carecerán de los instrumentos sicológicos necesarios para ser asertivos, críticos, creativos y libres para tomar decisiones y asumir sus responsabilidades en la vida, porque sus papás fueron tan protectores que no les dejaron ejercer su libertad y saber sumirt sus fallos y sus éxitos.
Si ya sabemos la educación que quiere BilduPodemos en Navarra,todos los críos antes de empezar la clase cantar el himno del soldado cobarde Vascongado con el brazo en alto y la kakariña de brazalete,nada mas,esa educación nazi…..
En cuanto a la educación universitaria el Rankings ISSUE (Indicadores Sintéticos del Sistema Universitario Español) 2015, que clasifica las 59 universidades españolas por su productividad (¡cielos! toquen madera) sitúa a la Universidad de Navarra en el séptimo lugar y a la Universidad Pública de Navarra en el puesto decimoséptimo. Todo un horror, vaya.
P.S. La Universidad del País Vasco se sitúa en el puesto cuadragésimo cuarto (44º para alumnos de la LOGSE).
http://www.expansion.com/sociedad/2015/03/16/5506dc5eca4741fc538b4571.html
Sr. Terantelo. La información que yo tengo es la que a lo largo de la vida me ha tocado. En mi época la única alternativa para un chaval/chavala de pueblo era irse a trabajar al campo, al monte o de criada y si había un poco de suerte y había alguna beca por ahí, ir a algún colegio de curas o monjas.
De mi generación y en mi pueblo, no llega al 10% los que tuvimos la oportunidad de estudiar algo.
Los demás lo dicho a Canadá, EEUU o los Alpes y alguno mas suertudo a alguna fábrica en Gipuzkoa.
Don Luis Miguel, tiene usted razón que las tasas de escolarización fueron creciendo paulatinamente, y quienes han podido estudiar gracias a las becas públicas han pasado de una minoría a una mayoría. La educación pública ha pasado de ser buena y apreciada como de calidad, por su exigencia, a ser mediocre tirando a mala. Y a mi juicio es por una errónea política educativa porgresista que considera que el esfuerzo, el sacrificio, el trabajo y el mérito no deben primar frente a otros valores o principios como la igualdad mal entendida por abajo, etc.