> N. C. Ahora que se habla tanto de la integración de Navarra y el País Vasco, y de la posible independencia, es bueno que se tenga en cuenta la siguiente información que publica Minuto Digital, a partir de un estudio realizado por la Tesorería General de la Seguridad Social. Según el informe público, en el año 2005 la Comunidad Autónoma Vasca tuvo un saldo negativo de 311 millones de euros para hacer frente a los gastos de pensiones contributivas, bajas por enfermedad y maternidad, y prestaciones familiares. «El País Vasco contribuye en un 6,3 % a la financiación del sistema de Seguridad Social español. Sin embargo, el gasto en pensiones que consume asciende al 7,1 % de los recursos del sistema». Estos datos no deberían sorprender, puesto que hace ya varios años que se público el informe dirigido por el Catedrático y miembro del Foro de Ermua, Mikel Buesa, La economía de la secesión, en el que se destacaba la catastrófica situación económica que atravesaría Euskadi en el caso de que se llegara a la independencia. Es difícil que la anexión de Navarra les ayude a enjugar el déficit, por lo que si acabamos unidos, lo estaremos en la pobreza y no en la riqueza.