A diferencia del impasse que vivimos a escala nacional, en Navarra ya tenemos gobierno al volver del parón vacacional. Por si teníamos alguna duda de que la incertidumbre y el no tener gobierno no es en absoluto la peor de las opciones.
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En términos de género, Navarra encadena 3 presidencias femeninas, lo que por otra parte confirma que el género de los gobernantes es un asunto irrelevante. Los gobernantes de hecho no tienen género. Tienen ideas. Buenas o malas. En caso de que las tengan.
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Como corresponde a un gobierno pentapartito, el tamaño del mismo es enorme. Obviamente el tamaño de este gobierno presidido por Chivite nada tiene que ver, como ahora nos intentan vender, con las necesidades de los navarros, sino con la cantidad de partidos que lo sostienen. Hay que multiplicar los cargos y publisueldos para repartirlos entre tanto coaligado. Chivite declara que ella tiene 13 consejerías y que Miguel Sanz antes de la crisis tuvo 12. Lo dice como para justificarse, cuando en realidad se condena a si misma poniendo ese ejemplo. Esto sí que es un régimen y tras el reparto de cargos vendrá el consiguiente reparto de dinero a todas las plataformas y medios afines. Nada que no hayamos visto la legislatura pasada pero un poco más intensificado, siquiera porque aumenta el número de aspirantes al reparto.
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La sostenibilidad del gobierno de Chivite descansa sobre la teoría del balancín. Es decir, se parte de la evidencia de que Chivite sólo tiene 23 diputados de 50 y que, para hacer cualquier cosa, tendrá que pactar balanceándose o con Navarra Suma o con Bildu. Lo que sucede es que el balancín se encuentra claramente descompensado porque ya hay un programa de gobierno, de naturaleza nacionalista e izquierdista, pactado con Geroa, Podemos e IE, por lo que el nuevo gobierno foral inicia su andadura presuponiendo que su apoyo fundamental será Bildu.
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Pese a lo que pudiera parecer, que se hable tanto de la dependencia de Chivite respecto a Bildu es casi un favor que se le hace al PSN. Es decir, claro que es terrible que el PSN ponga la gobernabilidad de Navarra en manos de Bildu, pero tampoco perdamos de vista por culpa de Bildu al resto de socios. O sea, tanto fijarnos en lo malo que es Bildu perdemos un poco de vista lo malos que son también los otros tres socios del PSN: los nacionalistas-anexionistas, los bolivarianos y los comunistas clásicos. Sólo por comparación con Bildu olvidamos lo terribles que son el resto de socios de gobierno del PSN.
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La presidencia de Chivite, por lo demás, representa ya antes de cualquier nuevo estropicio la consolidación de toda la política nacionalista de la anterior legislatura. Gracias a Cerdán, Sánchez y Chivite, esta legislatura se van a consolidar todos los caballos de Troya inoculados durante la anterior en la educación, la administración o los medios. El precio que Chivite paga por su sillón es no deshacer todas aquellas políticas que siguen generando nacionalismo y discriminación desde la propia administración y legislación foral, y que ella misma denunciaba cuando estaba en la oposición.
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Obviamente Navarra Suma ante esto sólo tiene por delante dos opciones, aunque por el camino le puedan colocar caramelos como el AVE, y son o consolidar el balancín o reventar el balancín. Es decir, el debate no es AVE o no AVE, sino balancín o no balancín. Dice Chivite que si Navarra Suma osa reventar el balancín tendrá que explicárselo a sus votantes. Pues que se lo explique. Salvo que estés cobrando una subvención o tengas un contrato con la administración nacional-socialista, entender la enorme conveniencia de reventarle el balancín a Chivite, Barcos, Santos, de Simón y Ruiz tampoco parece una cosa sumamente difícil.
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3 respuestas
En mi opinión, lo mejor que puede hacer Navarra Suma es achicharrar al Gobierno de Txibite en el Parlamento a base de propuestas, proposiciones y proyectos de ley que pongan a Txibite ante el espejo y frente a la hemeroteca y le obliguen a retratarse.
De mojados, al río, a darnos buen #Txibitazo.
A disfrutar de lo votado, y cuanto antes haya elecciones, mejor, para que los votantes del PSN espabilen y enmienden su enorme error.
Zerdán, Sántxez y Txiibite… menuda tresena de intelectuales manoseando nuestras vidas. Gente que, en toda su vida, no han generado ni un gramo de riqueza con su trabajo pretendiendo dirigirnos. La degradación de cosa pública en persona. Y la gente lela.