El abogado general del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE), Yves Bot, ha dictaminado que las células embrionarias que tienen capacidad de desarrollarse hasta formar un ser humano deben calificarse jurídicamente de embriones humanos y, por tanto, no se pueden patentar. Según informa Europa Press, la opinión del abogado general no vincula al Tribunal de Justicia, aunque éste suele seguir sus recomendaciones en el 80% de los casos.
El dictamen del abogado general se refiere al caso de un ciudadano alemán que en 1997 registró una patente que se refiere a células progenitoras neuronales aisladas y depuradas producidas a partir de células madre embrionarias humanas. A este respecto, el criterio del abogado general del Tribunal es que “dar una aplicación industrial a una invención que utilice células madre embrionarias significaría utilizar los embriones humanos como una banal materia prima, lo que sería contrario a la ética y al orden público”.
El dictamen determina que no es posible patentar embriones humanos y que el blastocisto debe considerarse un embrión humano. Se acaba así la teoría de que las hembras humanas quedan embarazadas de seres vivos no humanos. El dictamen sin embargo tendrá que enfrentarse al criterio del Tribunal y a un mundo en el que, la evidencia de que los no nacidos también son seres humanos, pesa menos (y algo al respecto se puede comprobar en Ansoáin) que los euros que pueden sacarse a costa de ellos.
Un comentario
Más bien me parece que afirma algo evidente que un conjunto de células con ADN humano se desarrollan y por esas manías que tiene el ADN dan lugar a un ser humano.
El problema viene cuando una evidencia, es decir algo perceptible por los sentidos, es celebrada como un triunfo. Mal están las cosas cuando es noticia lo evidente.
En otros lugares del mundo, donde no utilizan la cabeza para agredir al contrario sino que le dan un uso más acorde con el destino que le es propio, el debate se hace entre la supuesta libertad de la madre para eliminar una vida humana y los que defienden que esa tal libertad no existe ya que ninguna persona debe tener el poder de decidir sobre la vida de otro.