Un selecto grupo de cargos locales sanchistas han viajado a China a conocer las bondades del modelo político comunista del Xi Jinping. Estos eminentes políticos del lado correcto del muro sanchista y del lado correcto de la Muralla China fueron invitados, agasajados y financiados por la Asociacion de Amistad del Pueblo Chino y la Fundación Cátedra China. Naturalmente en China no hay nada que no responda escrupulosamente a la ortodoxia totalitaria del Partido Comunista Chino. No hay por tanto actuación alguna de este tipo de entidades que pueda molestar al Partido Comunista, que no cuente con el respaldo del régimen totalitario de Xi o cuyas actividades no se dirijan a promover la dictadura comunista china. La directora gerente de la Fundación Cátedra China, de hecho, ha explicado que los alcaldes invitados «se han quedado sorprendidos de cómo funciona la democracia local en China» (¿democracia?), porque la participación ciudadana para elegir a sus representantes es «mucho más alta de lo que se cuenta en España». El problema con los representantes de los chinos es que, por algún fenómeno incomprensible, entre 1.411 millones de habitantes es imposible encontrar un representante crítico con la dictadura y el partido comunista. Bien es cierto es que el último chino crítico con el régimen que se vio en China estaba en la Plaza de Tiananmén debajo de las orugas de un tanque.
Llegados a este punto no cabe sino desglosar el ilustre listado de alcaldes sanchistas, compuesto por Roberto Marcos (IU), alcalde de Langreo; Julio Millán (PSOE), alcalde de Jaén; Izaro Elorza (EH Bildu), alcaldesa de Oñati; Julián Nieva (PSOE), alcalde de Manzanares; Rosa Melchor (PSOE), alcaldesa de Alcázar de San Juan; Alaitz Zabala (PNV), concejala de Sondica; Francisco Rodríguez (PSOE), alcalde de Dos Hermanas; Jabier Alcuaz (EH Bildu), alcalde de Tafalla; Rafael Aguilera (IU), alcalde de Alcalá del Valle; Sergio Navas (PSOE), alcalde de Herencia; Martín Melero (IU), alcalde de la Puebla de Cazalla; Miguel Moreno (IU), alcalde de Zarzuela de Jadraque; Santiago Lázaro (PSOE), alcalde de Campo de Criptana, y Amaiur Guindeo (Geroa Bai), concejal de Burlada.
Sin duda al lector no le ha pasado por alto que entre las 14 eminencias haya dos representantes navarros, lo cual no está mal teniendo en cuenta que Navarra representa poco más del 1,5% de la población española: Amaiur Guindeo (Geroa Bai), concejal de Burlada, y Jabier Alcuaz (EH Bildu), alcalde de Tafalla. ¿Alguien se imagina a un grupo de alcaldes y concejales del PP y VOX viajando con todos los gastos pagados por el régimen para conocer el modelo nazi alemán, o el modelo chileno de Pinochet, y mostrando a la vuelta su satisfacción por su buen funcionamiento y su sorpresa por lo bien que representa a los alemanes o los chilenos? ¿Qué se diría de ellos? ¿Qué se diría de sus partidos?
El viaje de todos estos prebostillos nos pone sobre alerta de un par de situaciones muy preocupantes. La primera de ellas es que no solemos ser muy conscientes de la forma y la intensidad en que la dictadura comunista china, a la par que se mueve en el tablero estratégico mundial para convertirse en primera potencia, dedica recursos para financiar discretamente en cada país occidental diversas instituciones y plataformas, cultivando los contactos, las campañas y la publicidad, para blanquear y promover la imagen de la dictadura de Xi Jinping. La segunda cuestión preocupante es la devoción con la que los representantes de los partidos que sostienen el sanchismo se apuntan al culto del modelo totalitario comunista chino. Ninguna de estas personas hubieran sido invitadas si mostraran la mínima desafección a la dictadura china. Por lo demás a la vista está la afición del sanchismo al poder absoluto así como su hostilidad a la libertad educativa, a la libertad de prensa, a la propiedad privada, al libre mercado o a la libertad individual. No es sorprendente por tanto que los sanchistas que viajan a china vuelvan de la visita encantados con el modelo totalitario comunista. No es sorprendente, pero no es tranquilizador.
Un comentario
Gratamente sorprendidos por la alta participación para elegir a sus representantes,propuestos exclusivamente por el PC.Cabe rememorar la conversación de Lenin con F.de los Ríos y otros miembros de la legación socialista en el otoño de 1920.Parafraseando a Lenin, los actuales delegados en el paraíso democrático chino parecen haberse preguntado retóricamente: Libertad para elegir,…¿a quién? .Y parecen satisfechos con que los elegibles sean seleccionados por el omnipotente PC chino.Hace más de 100 años De los Ríos supo apreciar «las tenebrosidades de un régimen policíaco», que justo había comenzado. Hoy sus sucesores políticos son incapaces de ver la realidad de una hermética y atroz Dictadura con más de setenta años de cruento ejercicio.