Pues ya está, se ha consumado el paso o la asociación entre el PP y Sayas y Adanero, los ingratos diputados de UPN que, cuando UPN los cubrió de insultos y los excretó de su seno donde otros partidos solventan cuestiones similares con una sanción de 600 euros, en vez de meterse en un monasterio de clausura buscaron construir una alternativa en los brazos a los que Esparza los había arrojado. ¿Son unos tránsfugas Sayas y Adanero como les llama Chivite? ¿Unos corruptos como les llama Echenique? Respecto a lo primero, podría pensarse que Sayas y Adanero son tan tránsfugas como Carmen Calvo, que recientemente se desmarcó de su partido en la votación de la Ley Trans. A lo mejor no eres tú el que decide convertirse en tránsfuga sino tu partido el que te convierte en él, según decida decir blanco donde ayer decía negro o suspenderte la militancia por unos cuantos eones en vez de limitarse a imponerte una multa de 600 euros. En cuanto a corruptos, lo serían si hubieran cobrado del PP por cambiar su voto, o si en vez de meterse en un lío su situación fuera a ser ahora mucho mejor que cuando ya eran cómodamente dos reputados congresistas de UPN en Madrid. Muchos creen además, en Navarra y fuera de Navarra, que fue UPN quien dio un bandazo cambiando de partido y no Sayas y Adanero, que en aquella famosa votación de la reforma laboral simplemente se mantuvieron en su línea de desmarcarse por completo de Sánchez en vez de salir a su rescate. La consecuencia más evidente de aquella reforma laboral es que ahora el gobierno presume todos los días de que los parados ya no se llaman parados y el paro real no queda reflejado en las estadísticas.
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No nos interesa demasiado de todas formas en este análisis el itinerario personal de Sayas y Adanero, ni todo lo que estos meses les van a llamar, ni todo lo que ellos van a contestar a lo que les llamen. El punto es que si nosotros fuéramos rivales sin escrúpulos de UPN ya estaríamos cocinando una encuesta en la que el PP de Sayas y Adanero obtuvieran al menos 6 ó 7 escaños: para calentar el ambiente, para crear una brecha, para hacer daño a Esparza, y para cuestionar que UPN sea más voto útil que el PPN.
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La razón es evidente. Si a Esparza le salen las cuentas podría quedarse fuera del futuro gobierno todo el viejo cuatripartito. Al cuatripartito y sus medios por tanto, para que a Esparza no le salgan las cuentas del quesito, en vez de ningunear al PPN esta vez les interesa un PPN fuerte y un éxito electoral relevante de Sayas y Adanero. Claro que todavía no está claro en qué lista van a ir Sayas y Adanero. Si fuéramos el Noticias, ya estaríamos discutiendo cuántos diputados interesa que saque el PPN y pierda UPN.
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Lo cierto es que incluso sin Sayas y Adanero de por medio reforzando las listas del PPN la estrategia de Esparza de reeditar el quesito tiene unas cuantas fisuras. Esparza apuesta a que UPN puede ganar voto socialista por la izquierda en vez perderlo por la derecha al echarse en brazos de Pedro Sánchez. Esto va a complicar la campaña de UPN de cara a los próximos meses. Si carga mucho contra el gobierno de Sánchez puede alejarse del votante dubitativo de izquierdas, pero si juega a seducir al votante descontento de izquierdas puede perder el voto enfadado y preocupado de buena parte del electorado de derechas. Además está claro que el electorado de derechas enfadado y preocupado con el gobierno es abundante, mientras que no está tan claro que abunde tanto el votante izquierdista desencantado y menos el dispuesto a votar por UPN en vez de abstenerse. Lo que Esparza puede perder por la derecha del partido es seguramente mucho más real que lo que puede ganar por la izquierda. Eso sin contar con que el PSOE alguna vez quiera pactar con Esparza. O sea, el pacto del PSOE con los separatistas y la extrema izquierda no es táctico, es estratégico. Es su quesito.
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La otra ficha interesante del tablero es VOX. A VOX no le viene en principio bien el reforzamiento del PPN con Sayas y Adanero (asumiendo que el PPN se refuerza con estos fichajes, claro está). Un PPN separado de UPN y a la derecha de UPN en principio puede competir con VOX por un espacio común, o por lo menos por un trozo de espacio común. Antes con Navarra Suma todo lo que había a la derecha de Esparza era para VOX, ahora ya no. Lo que pasa es que si Feijóo juega la carta a nivel nacional de hacer de Esparza y de arrimarse tanto como pueda a la izquierda, eso le devuelve otra vez a VOX más espacio electoral. Por otro lado a VOX tampoco le interesa que salgan bien las cuentas del quesito.
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O sea, de una parte parece mejor PSN y UPN que PSN y Bildu, ¿pero dónde está el menú con la dieta para las personas con intolerancia al socialismo? Entre subir la cuesta con una mochila llena de piedras y otra llena de dinamita, mejor subir la cuesta sólo con la mochila llena de piedras, pero mucho mejor aún subir la cuesta sin ir cargados con ninguna mochila. VOX no cabe en el quesito porque no resulta pensable meter en el mismo equipo a los socialistas y a VOX. Por tanto lo que le interesa en Navarra a VOX es una mayoría alternativa a la del quesito. Esa mayoría está por construir pero, para conseguir eso, VOX no carece del valor para librar la batalla de las ideas que es precisamente lo que le ha faltado todos estos años a la derecha foral y española. Y le sigue faltando. Por eso lleva años en retroceso. Por eso la derecha sólo crece a duras penas y en tiempo de crisis. Naturalmente si fuéramos el PSN o el Noticias en nuestra próxima encuesta le daríamos a VOX sólo entre cero y dos diputados. Al votante de derechas habría que dejarle caer la idea de que votar a VOX a lo mejor es inútil y que mejor votar al PPN de Sayas y Adanero. Y al votante de izquierdas habría que dejarle caer la idea de que hace falta movilizarse no sea que VOX entre al Parlamento de Navarra con dos diputados. Antes de votar en mayo, con un espacio electoral tan fragmentado, vamos a ser extremadamente manipulados. Como siempre, pero más aún en esta ocasión.
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2 respuestas
Me da que en Navarra os vais a comer otros cuatro años de cambio y progreso ilusionantes pero la guerra de los cien años terminó
También es importante recordar que tanto País Vasco como Navarra disfrutan de unas ventajas fiscales sin justificación histórica ni tonterias nacionalistas oportunistas. Creo que VOX ya ha dicho que se tienen que modificar. La reforma fiscal que necesita España es muy importante y en primer lugar debe estar basada en la “ventanilla única” como está establecida en Francia y seguramente otros países europeos (yo solo conozco el caso francés). La ventanilla única implica más dificultad para el fraude al haber un mejor control, una excusa menos para el nacionalista oportunista ya que todos los ciudadanos pagan los mismos impuestos y se establece una forma de “himberciones” en cada región totalmente clara y sin ambages.
Ahí lo dejo, pero sí va ser interesante lo que se avecina en Navarra
Nada, que dice Jabiertxo Espartza que si no le apoya Txibite para comer quesitos bajo el árbol de Guernica, que ya le ayudará Geroa Bai. Que va a ser presidente sí o sí, dejadme solo dijo, es más, ha expulsado a todo el que le rodeaba, PP, Cs, Sayas, Adanero… y espera, que tras el fracaso del 28M aún expulsará al que proteste.