De esto no harán pancartas las peñas confederadas, pero Asirón parece tener una obsesión con los árboles. Arbol veo, árbol talo. Quizá se trata de un retorcido complejo derivado de haber visto a un aizkolari cortando troncos en la infancia. Sea como sea el alcalde de Bildu ha vuelto a hacerlo. El modus operandi el acostumbrado. Bajas la persiana por la noche y hay un árbol. La subes por la mañana y ya no hay árbol. Nocturnidad, alevosía y agostidad, para eclipsar la hipocresía ecosostenible de la municipalidad.
Asiron, que encabezó las protestas contra la tala de arobles en la calle Sangüesa, sigue sacando el hacha ahora que gobierna. Después de Beloso, hoy tala otros siete en Iturrama sin previo aviso. Solo es ecologista cuando gobierna UPN. pic.twitter.com/DsTkkgc6Sw
— UPN Pamplona (@UPN_PNA) August 29, 2024
El hacha de Asirón, como denuncia UPN, tiene dos filos o dos varas de medir. Ahí estaba Asirón encabezando las protestas cuando quien osaba tocar un árbol era el alcalde o la alcaldesa de otro partido. Ecologista de día, aizkolari de noche. Amigo de los vegetales en la oposición, arboricida implacable desde el poder.
#ÚltimoPleno
— EHBildu Iruñea (@ehbilduirunea) May 4, 2023
🔴 @ehbilduirunea explica las razones por las que está en contra de la actuación propuesta para el carril bici de Beloso.
🎥 @Borjaizagirre: «Va a suponer la tala de todos los árboles de la Cuesta y hay alternativas mucho más económicas y ecológicas». pic.twitter.com/ZTS6R4Hjzi
Asairón no es el único ecologista con doble vara de medir en esta cuestión. Tras arrasar los árboles de Beloso, más otros bastantes por distintos puntos de la capital, esta nueva tala tampoco desatará ninguna oleada de protestas entre las plataformas ecologistas cuya activación o desactivación en defensa de los árboles depende también del color del consistorio. En realidad no importa nada el árbol. La doble moral es ninguna moral. El árbol se puede aprovechar para hacer papel, para hacer leña, para hacer tablones, para hacer figuritas… y para hacer campaña política. Cuando el árbol ya no es útil para sacar votos, entonces se puede talar.
Dejaremos esta imagen y solo diremos Los Árboles Urbanos hacen una gran diferencia, las altas temperaturas ponen en juego la salud de todos. #LeyDeArboladoUrbano e #InfraestructuraVerde pic.twitter.com/OEdzcxfBrX
— Unidos Ley del Árbol Urbano #LeydeArboladoUrbano (@Leyarbolurbano) January 8, 2022
Para no incurrir en la misma hipocresía denunciada, lo cierto es que seguro que existen razones de utilidad pública o de seguridad para talar árboles de vez en cuando. Lo que sucede es que una vez más no se puede usar una doble vara de medir para juzgar al ayuntamiento según su color. Y después está lo de Beloso, que nadie lo quería, que existían alternativas y que no se ha querido buscar otra solución. En otras circunstancias nadie se fijaría demasiado en cada árbol que toca el ayuntamiento, pero es el propio Asirón el que se ha convertido en víctima de sus malas prácticas al haberse dedicado a encabezar protestas y hacer demagogia con esta cuestión. Lo raro sería que ahora cada vez que toca un árbol no se le recordara su fototeca en la oposición, cuando se manifestaba y hacía fotos con el móvil en la Plaza de la Cruz. Es como si tus altavoces presumen de que a las 24 horas de ser alcalde has acabado con el problema de los sin techo y a los 4 días se te muere de frío un sin techo en un parque. ¿Cómo no se te va a señalar?
¡Vaya! me había hecho ilusiones, creí que estabas hablando de todas las víctimas de #ETA que se quedaron sin aliento, sin respiración para siempre, porque esos a los que llamas "presos políticos" las mataron.
— Consuelo Ordóñez (@ConsuorF) April 10, 2023
Pero veo que seguís en la misma provocación de siempre.@ehbildu pic.twitter.com/YjAowNSN7n
Todo ello por no mencionar el pecado de origen de Asirón, que es el de formar parte de una coalición que llama presos políticos a los asesinos de ETA. El jefe de Asirón es un secuestrador y la mano derecha de Asirón en el ayuntamiento, Abaurrea, formaba parte de las listas de ETA-Batasuna cuando ETA-Batasuna se dedicaba a hacer política por un lado y matar a sus rivales políticos por otro. Tomás Caballero, por ejemplo. Como se aprecia en el vídeo anterior, Otegui llama presos políticos a los asesinos de ETA y Asirón aplaude, y además tala árboles, y gestiona mal, y se le acumula la inseguridad, y atropella a los castellanoparlantes, y sólo escucha a los suyos, y reparte los dineros del ayuntamiento con favoritismo, y sus amigos insultan en Curia, y se le mueren los sin techo en la calle, y es alcalde no porque le hayan elegido los pamploneses sino por un intercambio de votos pactado en Madrid. No hay casi nada normal en el hecho de que sea alcalde de Pamplona alguien como Asirón, salvo que dilatemos hasta perder todo sentido el significado de la palabra “normal”.
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