Ayer la portada del Diario de Noticias se convertía casi en un monográfico sobre la noticia adelantada por Hispanidad, las puertas giratorias y el fichaje de Barcina por Telefónica. Y está muy bien eso de criticar la puertas giratorias. Y está muy bien que el Gobierno de Navarra esté preocupado. Y es cierto que a UPN esto tampoco le ayuda, aunque quizá a estas alturas tampoco le perjudique ya mucho lo que haga Barcina, ex presidenta del gobierno, ex candidata de UPN, ex presidenta de UPN.
Lo que pasa es que si vamos a criticar las puertas giratorias entonces critiquémoslas todas. Recordemos entonces el paso de Atutxa del gobierno vasco a Iberdrola, el de Ardanza a Euskaltel, o el de Imaz a Repsol.
Pero es que aparte de estos nombres hay muchos más en la hemeroteca de la política vasca con los que se podría cebar el Grupo Noticias.
Jose Andoni Aurrekoetxea, que pasó de senador del PNV a consejo de Enagás.
Mario Fernández Pelaz, que pasó del gobierno de Garaicoechea a Repsol.
Euskaltel ha llegado a ser conocida no ya como una puerta giratoria, sino como el «cementerio de elefantes del PNV». El primer presidente de la compañía, José Luis Larrea, fue Consejero de Hacienda y Finanzas del Gobierno Vasco. El número dos, Carlos Lambarri, había sido viceconsejero de Hacienda. A Larrea le sucedió en la presidencia de Euskaltel el ex lehendakari José Antonio Ardanza.
El director gerente de Metro Bilbao, Eneko Arruebarrena, fue nombrado cuando todavía era alcalde de Leioa por el Partido Nacionalista Vasco.
Por si fuera poco, el PP vasco denunció hace unos meses que 10 de las 18 sociedades y empresas públicas que dependen directamente de la Diputación Foral de Bizkaia están dirigidas por ex cargos nacionalistas en diversos municipios o que han figurado en listas electorales como candidatos.
Naturalmente esto no santifica la puerta giratoria de Barcina, pero no deja de ser curioso cuántos resultados arroja Google si se introducen como criterio de búsqueda «puertas», «giratorias» y «PNV», y los pocos que corresponden al Grupo Noticias, que en cambio le hace una edición especial de su diario a Yolanda Barcina. No se trata de poner el ventilador, pero tampoco de contar sólo una parte de las cosas.
Por otro lado, que un ex-político sea fichado por una gran empresa no tiene porqué ser algo esencialmente malo, si se trata de alguien sobradamente cualificado. Sólo que en este país resulta un poco raro que las grandes empresas no se fijen en ciertas personas para ficharlas antes de ser políticos, sino sólo después. Lo normal debería ser que alguien al salir de la política volviera al estatus profesional anterior. Si el estatus anterior era de empresario o gran directivo, sería normal que volviera a ese estatus, pero resulta más extraño salir de la política a un estatus muy distinto a aquel con el que se entró. Por ejemplo, lo normal es que Uxue Barkos vuelva a presentar el Teleberri cuando acabe la presidencia.
15 respuestas
Muchas gracias a Barcina por esta estupenda campaña de promoción del nacionalismo en Navarra. Espero que le cundan los millones que sin duda ganará en Telefónica.
En fin…
Qué cosas tienen estos de NC. Esto de las puertas giratorias es una cosa que sólo afecta a los no-nazionalistas, que sólo merecen la soga, el insulto, el repudio y extrañamiento, es escupitajo y la pedrada en el ventanal, la cerilla dispuesta y el garrote vil. Hayan hecho lo que hayan hecho.
Los nazionalistas son otra cosa, no sólo el poder omnímodo y eterno, sino que cuando decidieren, si así lo desean, abandonar las duras cargas del puestico público, son merecedores de una vida acorde con su Rh-, su batúa aunque sea tardío, y su respeto a la jerarquía y órdenes del partido, a los supuestos fundamentales y básicos del racismo vasco.
Sin quitarle la razón a Navarra Confidencial en este caso, ¿no podríamos decir eso de «Mal de muchos, consuelo de tontos»?
Si en este momento se ha producido el fichaje de Barcina habrá que hablar de ese fichaje, ¿no? Y vuelvo a repetir que en el resto de casos es igual de rastrero.
Y además, «aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid» comento que los del PNV son muy malos. ¿Sólo hay ejemplos de puertas giratorias en el País Vasco?
Con artículos como estos se pierde mucha credibilidad.
La previsivilidad de NC ya toca el cielo.
Vuestra Amada Líder, asesorando a una compañia de telecomunicaciones sin dejar el cargo en la UPNA.
Buen sueldo, poco trabajo y a seguir viviendo de todos.
Poca autocrítica, no les sorprende, incluso les parece bien. Réditos por ayudas a estas empresas, que no se escriben en papel, pero son lo que son, pagos encubiertos por su labor facilitadora.
No tienen vergüenza ni la han tenido nunca.
Lo peor es lo de NC, penoso, intentando sacar la cara a Barcina diciendo que los demás tambien lo hacen. Por eso y precisamente por eso es por lo que los ciudadanos de esta comunidad han decidido el cambio.
Animo y a seguir así, que vais de cojones.
Poco que añadir. Los neopeneuveros adoradores de la Amada Líder y sus colegas los podemitas ayer estuvieron pasando por Wasap su indignacion con lo de Barcina con memes y comentarios. Olvidando que el partido de Barkos prácticamente inventaron las puertas giratorias.
Lo de Barcina está mal por cierto, pero un poco de coherencia por favor, que parece que hay casta de primera y casta de segunda que es menos casta
Algo está bien o mal hecho en función del hecho y no de quien lo realice.
Si robar o matar está mal, está mal para todos.
Si las puertas giratorias están mal, están para todos. No me vale el decir como justificación «y tu más».
Y en este caso concreto estamos hablando de alguien a quién los navarros la hemos tenido de mandataria suprema y que, aunque las decisiones que tome ya no nos afecten de forma tan directa, siempre queda la duda de que las que tomó anteriormente las hizo pensando en este nuevo puesto que le va a solucionar el futuro económico y además con muy poco trabajo a realizar por su parte.
Hombreeeeee, lo de meter a Imaz en ese saco me parece un poco exagerado dado el curriculum del personaje y el puesto que desempeña; ejecutivo y no dietético, donde trabaja.
A no ser, claro esta, que la bioquímica de las enzimas lácteas sea aplicable al rendimiento de la fibra óptica…
Como era previsible, las tropas «zurdo-nacionalistas» siguen viendo la paja en el ojo ajeno y no ven la viga en el propio. ¿Que esperaban Vds?. ¡La envidia, Sres.!, la envidia es la que sustituye a la razón por estos lares.
Para mi, es más importante saber de donde vienen a la política que a donde van después; es realmente preocupante que llegue a los cargos institucionales gente que la única preparación que pueden aportar son sus licenciaturas en «Demagogía» (con acento en la í) o sus doctorados en mediocridad además, por supuesto, del carnet de «conductor de pancarta».
La verdad es que hay frases que tienen mucho éxito y las acabamos repitiendo sin darnos cuenta y eso tiene el peligro que acabemos confundiendo las cosas. Eso ha pasado con «casta» y ahora con lo de las «puertas giratorias».
Lo de la puerta giratoria es una expresión que condena el hecho de que alguien que ha tenido poder de decisión en el ejecutivo (si hubiera legislativo con poder también pero los nuestros son escenarios para repetir consignas) al poco de cesar en ese cargo acabe en un puesto bien remunerado de una empresa quedándonos la sospecha de eso es una recompensa a servicios prestados bajo manga o bien una especie de compra de informaciones confidenciales. En ese sentido incluso en la sociedad relativista que vivimos hay una extraña coincidencia de que eso es inmoral o si se quiere ser más moderno indecente. Y comparto esa opinión porque un político debe actuar de modo altruista (o al menos parecerlo) y no buscar un beneficio propio material.
A esto debemos añadir que ya vivimos en una partitocracia y los partidos son órganos estatales el reproche a las puertas giratorias debe hacerse también a los altos cargos de los llamados partidos nacionales porque su jerarquía alcanza a miembros de los diversos niveles de gobierno.
Analizo el caso Barcina y la verdad que no veo donde está la puerta giratoria. Barcina ha sido Presidenta de un partido con poder local en una territorio que es el 2% de España y en población el 1’2%. Como Presidenta de un Gobierno cuyas competencias apenas afectan al negocio de Telefónica no veo que favores o que información estratégica puede dar a su nueva empresa.
¿Entonces por qué tantos vemos tan poco estético el nombramiento de Barcina? Pues en mi opinión creo que se trata de la colocación por parte de una amigo (o familiar que no conozco esas intimidades) de una persona con un perfil no encaja en el negocio de la multinacional. Creo que se trata de un caso de «amiguismo» (¿nepotismo?) de una persona con relevancia social.
Obviamente aun siendo reprobable el amiguismo (por cuanto relega a personas más capacitadas para el puesto por el solo hecho de la amista) es un fenómeno que por desgracia excede de lo político como si sería un caso de «puertas giratorias».
¿No es más escandaloso emplear en la Administración, o en empresas participadas, a personas que forman parte de la «familia política partidista» con un perfil no encaja en el «negocio de la multinacional»?. Y esos sueldos sí van a cargo de nuestros bolsillos. Los partidos políticos hace tiempo que se han convertido en agencias de colocación de sus militantes.
Telefónica es una sociedad mercantil privada y como tal, tiene derecho a fichar para sus órganos de dirección a quien le plazca, eso no es ningún delito. Como sociedad con ánimo de lucro, y eso tampoco es ningún delito, ya sabrá hacer rentable lo invertido en los honorarios que reciba Dña. Yolanda, en caso contrario, como nunca ocurre en la Administración o en empresas públicas, poco durará en el puesto.
Ya está bien de envidias y de someternos a la dictadura de «lo políticamente correcto»
Bajo mi prisma tendemos a sobrevalorar a Barcina y a Uxue, así como donde se mueven y ambitos de influencia.
En el primer caso, revisemos uno a uno a expresidentes autonómicos, donde acaban – Senado, su poder de influencia estatal-poco o nulo, ahora combinamos con Telefónica y no me da.
Para eso deberías haber sido exministro o director general. Lo cual me lleva a la palabra Pizarro, hay que dar de comer a la media naranja.
No niego cierto tufillo a favor de un favor a otro favor, pero para esta escala le viene muy grande.
Al margen de la formación y el perfil profesional de algunos casos que se citan aquí, yo veo una diferencia fundamental entre algunas de estas contrataciones y el de Barcina. El factor socio temporal.
Puede que hace cuatro, cinco o diez años, este asunto de las puertas giratorias no era algo que a la sociedad le causase ninguna alarma; pero hoy, gracias a la denuncia de los partidos emergentes y de cambio, esto ya no es así. Hemos evolucionado muy rápidamente, y la sociedad es cada vez más exigente y rigurosa con sus gestores, y no permite abusos ni durante ni después del desempeño de sus cargos.
En el momento actual, la sociedad entera reprueba estos comportamientos, aunque Barcina no es un persona a la que le afecten demasiado lo que pueda pensar la gente de sus actos, siempre que ellos le beneficien económicamente. No se ruborizó cuando se subió el sueldo un 30%. No se ruborizó cuando justificó sus bi-dietas y tri-dietas con los altos sueldos de los albañiles. No se cortó un pelo para exigir su sueldo de 19 días en la universidad, sin ir a trabajar ni una sola hora. Y mucho menos le va a importar ahora, que ya no tiene nada que perder, que toda la sociedad censure su nuevo nombramiento.
La Barcos, ese submarino del PNV, acabará en Euskaltel.
Espero que de vendedora de móviles.
Navarra confidencial debería cambiar su nombre a:
http://www.balonesfuera-ytúmas.com