Omnes una manet nox. Este dicho latino viene a significar que todos estamos sumidos en la misma oscuridad, desde luego respecto al futuro electoral, incluyendo nacionalistas y no nacionalistas, izquierdistas, derechistas, centristas y parapentistas. Nadie sabe más sobre el futuro que la persona de enfrente o de al lado. Tras cuatro años de cuatripartito, el mes que viene al fin levantaremos la tapa del puchero y veremos si tenemos la rana cocida o huyó en algún momento de un salto al notar el calorcito. Pero hasta entonces nadie sabe nada. Todo son especulaciones. Y entonces es cuando llega la encuesta de CIES para Diario de Navarra y pensamos que vemos con rayos X a través del puchero, más tarde analizaremos si con algún fundamento.
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El caso es que este domingo el Diario de Navarra publicaba la ansiada encuesta de CIES, la cual arrojaba los siguientes resultados:
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Con estos porcentajes de votos, los 5 diputados en liza por Navarra se repartirían del siguiente modo:
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–2 Navarra Suma
–2 PSOE
–1 Podemos
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Por bloques, el nacionalismo tendría el 18,3% de los votos, el cuatripartito el 34,2%, la izquierda el 41,6% y el centro-derecha el 37,9%.
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Si observamos los resultados por bloques de las Generales de 2016, comprobamos que el nacionalismo entonces tuvo en Navarra el 13,6%, el cuatripartito el 41,9%, la izquierda el 45,7% y el centro-derecha el 37,9%.
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Comparando ambos resultados por bloques, vemos que Podemos cae más de 12 puntos y la izquierda, en buena medida por ello, más de 4. Por contra, el nacionalismo sube 4 puntos por lo que podría pensarse que vuelve al nacionalismo una cierta transferencia de voto que hubo en 2016. Paradójicamente, de este regreso de Podemos y de creer a la encuesta se beneficiaría principalmente Geroa Bai, con casi 3 puntos porcentuales de subida respecto a los resultados de 2016. El otro gran beneficiado del desplome de Podemos sería el PSOE, con 8 puntos de subida respecto a 2016. El bloque de centro-derecha literalmente no se mueve, permaneciendo en el 37,9%. Respecto a 2016, el cuatripartito pierde 7,7 puntos de apoyo.
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Según la encuesta de CIES, Vox sólo obtendría el 2,8% de los votos. Navarra Suma seguiría obteniendo dos diputados incluso sumando los votos que CIES le otorga a Vox, por lo que no habría perjuicio por culpa de la fragmentación.
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La cuestión final, naturalmente, es qué credibilidad le podemos otorgar a la encuesta de CIES.
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Analizando las encuestas pasadas de CIES nos encontramos, por ejemplo, con que en abril de 2015, de cara a las forales de mayo, la encuesta publicada por el Diario de Navarra sólo concedía al cuatripartito entre 24 y 25 diputados, frente a los 26 que consiguió, o le otorgaba en cambio 3 diputados a Ciudadanos, frente a los cero que obtuvo.
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Todo lo anterior nos lleva a concluir que, pese a lo que nos gustan siempre las encuestas, todos seguimos a oscuras hasta que levantemos la tapa del puchero y veamos lo que efectivamente se ha cocido ahí dentro estos cuatro años. Ante tal incertidumbre tal vez uno debiera votar conforme a sus creencias como si fuera el único votante del mundo. Y el más libre e incondicionado por tanto.
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