Cinco encuestas sobre Navarra y 38.000 indecisos

¿Cómo empezamos el lunes pasado? Con sendas encuestas de CIES para Diario de Navarra y de Gizaker para Diario de Noticias. ¿Cómo empezamos esta semana encarrilando la recta final hasta el domingo electoral? Pues con otras dos nuevas encuestas de CIES y de Gizaker para el Diario de Navarra y el Noticias. En el siguiente cuadro vamos añadiendo por tanto encuestas, porque resulta curioso comparar las encuestas de esta semana (en rojo) con las de la semana anterior.

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¿Qué movimientos se observan entre los resultados de esta semana y los de la semana anterior? Los movimientos resultan bastante limitados en ambas encuestas, oscilando un máximo de 1 diputado arriba o abajo respecto a los resultados de las encuestas anteriores. Eso sí, se siguen observando importantes e incluso crecientes discrepancias entre la última encuesta de CIES y la última de Gizaker.

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La última encuesta de Gizaker, por ejemplo, le otorga a Navarra Suma 15 diputados, frente a los 19 que le concede la horquilla máxima de CIES.

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CIES amplia de 9 a 10 la horquilla máxima del PSN, baja 1 diputado la horquilla de Geroa, sube 1 diputado la horquilla de Bildu y sube 1 diputado la horquilla de Podemos. La última encuesta de CIES otorga 1 diputado a VOX, mientras que en la anterior no le concedía ninguno.

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Gizaker, por el contrario, respecto a la encuesta anterior de la propia Gizaker hace una semana baja al mínimo de la horquilla anterior a Navarra Suma y al PSN, subiendo en cambio al máximo de sus horquillas a Geroa Bai y Bildu. Se confirma un poco por tanto la sospecha de que los pronósticos de las encuestas tienden a reflejar el deseo de quienes encargan la encuesta.

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IE y VOX mantienen el pronóstico de 2 diputados en las dos encuestas de Gizaker, pero en cambio observamos que, mientras en la última semana CIES le baja un diputado a Podemos, Gizaker se lo sube.

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Una vez más provoca cierta perplejidad observar como el termómetro colocado en el centro de la bañera puede arrojar medidas diferentes, a veces incluso tan diferentes. Y es que entre y una y otra encuesta, por ejemplo, hay una diferencia de hasta 4 diputados respecto a Navarra Suma, y de hasta 2 respecto a PSN, Geroa Bai y VOX. Algunas diferencias pueden ser mayores aún si recuperamos y comparamos los resultados del CIS ¿Cómo confiar en tres termómetros que arrojan lecturas apreciablemente distintas? ¿Cuál es el termómetro bueno? ¿Demostrará el resultado electoral que ninguno de los termómetros era preciso? ¿En base a las lecturas de qué termómetro podemos decantar nuestro voto? ¿O mejor no tener en cuenta ninguna encuesta a la hora de votar?

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Aunque todas las encuestas dejan abiertos varios escenarios, vemos por ejemplo que Gizaker otorga a Navarra Suma y PSN sólo 23 diputados, insuficientes para formar mayoría, frente a los hasta 29 que le llega a otorgar CIES. Hablamos por tanto de 6 diputados de diferencia entre una encuesta y otra. ¿Seguro que se han hecho en la misma comunidad y en las mismas fechas? ¿Seguro que son de fiar las encuestas cuanto muestran entre sí semejantes diferencias?

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Observando todas las encuestas podríamos encontrarnos tras las elecciones con el escenario de que Navarra Suma y PSN tienen mayoría, o que PSN+Podemos+Geroa+IE tienen mayoría, o incluso que el cuatripartito revalida su mayoría. O sea, que casi todo es posible, al menos aritméticamente, porque otra cosa sería políticamente.

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Políticamente, Chivite afirmaba ayer en una entrevista concedida a Diario de Navarra que “No voy a gobernar con Esparza; con Barcos, no lo sé”, a lo que añadió, para ir cerrando todas las puertas, que “no voy a tener como socio de gobierno a Navarra Suma”. Es más, preguntada sobre si veía a la militancia del PSN apoyando a un gobierno con Navarra Suma contestó: “No. ¿Por qué se cree que Pedro Sánchez triunfó en Navarra? Por el “no es no”. Y el voto en las generales lo dejó muy claro”.

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Chivite mantiene una distinta vara de medir respecto a la derecha y el nacionalismo porque, por ejemplo, contempla poder gobernar con el nacionalismo porque asume que con el nacionalismo puede llegar a un pacto en el que no haya políticas nacionalistas, pero sin embargo no puede asumir la posibilidad de llegar a un pacto con la derecha en el que no haya políticas derechistas. Chivite también utiliza una doble vara de medir al considerar que pactar con Navarra Suma es pactar con el PP pero que pactar con Geroa Bai no es pactar con el PNV sino con alguien distinto. Chivite ve lo que quiere ver, si lo quiere ver.

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Si todo el mundo es coherente con lo que ha dicho y la realidad coincide aproximadamente con las encuestas, los escenarios posibles son que el PSN gobierne con Geroa o que el cuatripartito conserve el poder. Tampoco se puede excluir que el PSN apoye un gobierno de Geroa porque Chivite no niega tajantemente esta posibilidad, sino que se limita a descartar que Geroa pueda sacar más diputados que el PSN y con más diputados sería el PSN quien debiera liderar el gobierno. ¿Pero y si Geroa sacara más diputados que el PSN? Chivite entra en bucle en la entrevista e insiste en que no es un escenario que considere posible.

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Quedan obviamente algunos resquicios a la incertidumbre como un resultado insospechado o que nadie consiga formar gobierno porque el PSN no pueda gobernar sin Geroa, Geroa no quiera apoyar una presidencia del PSN, el PSN no quiera apoyar una presidencia de Geroa, Sánchez ahora o más adelante se pelee con los nacionalistas o no salgan las cuentas sin Bildu, aunque Chivite también advierte en la entrevista que “no hay ningún mecanismo parlamentario que impida aceptar los votos de nadie”. O sea, que Chivite aceptaría ser presidenta llegado el caso con los votos de Navarra Suma, de Geroa, de VOX o de Bildu.

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Las alternativas al final que propone María Chivite para Navarra y que alientan las encuestas son o que gobierne Geroa Bai o que cogobierne.

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Salvo que ante esta disyuntiva los 38.000 navarros indecisos que estima CIES se salten todas las previsiones y decidan una cosa distinta.

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