La inquietud ante un hipotético conflicto de intereses, la puso de manifiesto durante el turno de ruegos y preguntas un antiguo presidente del Consejo de Administración, según le consta a Navarra Confidencial. Las diversas intervenciones que se sucedieron no pusieron fin a la controversia. De hecho, un año después y a punto de formarse una mayoría política sustentada en el nacionalismo anexionista, la lógica inquietud persiste y aumenta.
En este complicado momento, Diario de Navarra y su independencia son un instrumento fundamental para la defensa de nuestra tierra. La doble dependencia del Director General y el Presidente del Consejo es un hecho. La única forma de garantizar la total independencia del Diario respecto del gobierno en formación, por tanto, sería que don Luis Colina Lorda y Alvaro Bañón Irujo se decantaran renunciando a uno de los dos cargos que ocupan. De esa forma, si eligen seguir en el Diario, que sea con su independencia totalmente garantizada.