El Gobierno de Navarra ha preparado un borrador de Decreto Foral que diseña un nuevo modelo “de atención a la salud sexual y reproductiva que garantiza la realización de interrupciones del embarazo en la red pública o la reproducción asistida en mujeres solas o con pareja del mismo sexo”, entre otras prestaciones.
Aborto y registro de objetores
La norma proyectada asegura el acceso a la interrupción voluntaria del embarazo como una prestación normalizada, que habrá de realizarse preferentemente en centros públicos.
Para poder ejercer la objeción de conciencia, los profesionales sanitarios directamente implicados deberán estar inscritos en el “Registro de Profesionales Sanitarios Objetores de conciencia en relación con la interrupción voluntaria del embarazo”.
El borrador de la nueva norma, sin embargo, no aporta grandes cambios sobre la situación que, para mal, ya existe en este momento. El gran perjudicado de hecho podría ser el abortorio de Ansoáin, salvo que se llegue a plantear que sea publificado como las ikastolas de la zona no vascófona. La realidad, sin embargo, es que en todas las comunidades de España el 95% de los abortos se llevan a cabo en abortorios privados. Juzguen ustedes mismos si por causa de una conspiración de la caverna en toda las comunidades de España o porque los médicos de la sanidad pública, salvo casos de peligro para la vida de la madre o graves malformaciones en el feto, evitan ser ellos mismos los que realicen los abortos.
Hijos para mujeres solteras y parejas de lesbianas
En el borrador del Decreto Foral se prevé la inclusión en la Cartera de Servicios Complementaria de la Comunidad Foral los tratamientos de fertilidad y reproducción “para mujeres que convivan en pareja del mismo sexo o sin pareja masculina sin necesidad de acreditar la existencia de indicación terapéutica reconocida”.
Por un lado se potencia la eliminación de niños, por otro que las madres solteras y las madres lesbianas puedan tener hijos.
Educación en la uniformidad de pensamiento sobre la diversidad sexual
El Departamento de Educación, complementariamente, desarrollará las medidas necesarias para la inclusión de la Educación Afectivo-Sexual en el currículum de las enseñanzas no universitarias y por lo tanto en el Proyecto Educativo de Centro con un enfoque que contribuya, entre otros, a “la promoción del reconocimiento y aceptación de la diversidad sexual”. Lo dicho: se reconoce la diversidad sexual pero no la diversidad de pensamiento sobre la diversidad sexual.
Cambio de sexo
La atención a la transexualidad incluirá terapias hormonales, cirugías plásticas sobre mamas y torso o “cirugías de reasignación sexual proporcionados en el momento oportuno”. Además se proporcionará atención psicológica acorde a las circunstancias personales y “a sus deseos de cambio en la manifestación morfológica acorde con el sexo sentido como propio”.
La verdad es que eso de la “reasignación sexual” resulta un tanto voluntarista. Como poner una etiqueta de cognac a una botella de Coca-Cola y decir que la Coca-Cola ha sido reasignada en cognac. Entretanto, a una mujer con cáncer de mama a lo mejor el sistema de salud pública no le paga la reconstrucción o a una persona mayor no le financia el audífono.
Abierto a la participación mediante un buzón de sugerencias
Una vez publicado el borrador, se abre un plazo de presentación de alegaciones y sugerencias hasta el 12 de noviembre en la siguiente dirección de correo electrónico: sgtsalud@navarra.es
https://gobiernoabierto.navarra.es/sites/default/files/proyecto_df_salud_sexual_y_reproductiva.pdf
19 respuestas
¿Solo en ese aspecto?.
Creo que el artículo da en la clave al decir “se reconoce la diversidad sexual pero no la diversidad de pensamiento sobre la diversidad sexual”.
¿Respeto a todos? Por supuesto. Ahora bien, ¿todos tenemos que tener la misma opción sobre todos estos asuntos? Es claro que no es así, y los poderes públicos no tienen que imponer a nadie una manera de pensar.
No al adoctrinamiento.
Paco, yo soy liberal, por tanto no me meto en las decisiones íntimas y personales de cada cual mientras no me sableen para ello ni nos adoctrinen los progres desde el gobierno, el cole u otros medios. Cada cual tome sus decisiones y asuma sus consecuencias.
No tienen otra cosa mejor que hacer que mirarse la entrepierna y, ¡el colmo!, que les entre la duda.