¿Cuántos votos hacen falta para poder conseguir un diputado en las elecciones del próximo 28 de abril?
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Al margen de quién pueda conseguir esa cifra mínima o incluso una mayor, ¿cuál es la cifra a la que al menos hay que aproximarse para poder aspirar a un diputado?
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Para responder a la pregunta, primero es preciso señalar que el censo navarro ronda los 485.000 votantes. Obviamente el número de votos necesarios para obtener 1 diputado varía según el número de votantes. Asumiendo que vote en torno al 70% del censo (unas 340.000 personas), y considerando que hay en juego 5 diputados, una primera aproximación nos llevaría a pensar que hacen falta unos 68.000 votos para obtener cada diputado.
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Si, no obstante, sólo votara el 60% del censo, la cifra bajaría a unos 58.000 votantes, y si por el contrario la participación se elevara al 80% harían falta unos 77.000.
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Observando los resultados pasados de las generales en Navarra, sin embargo, se observa que de hecho la cifra puede resultar significativamente menor.
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Podemos, por ejemplo, en las generales de 2015 obtuvo 2 diputados con 80.961 votos. Es decir, obtuvo cada diputado con alrededor de 40.000 votos. La participación fue del 74%. Es el registro reciente más bajo que hemos encontrado. Geroa Bai obtuvo 1 diputado en 2011 con 42.000 votos (participación del 68%). En esas mismas elecciones, por otro lado, el PSOE sólo obtuvo 1 diputado con 72.000 votos.
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¿Cómo es posible esta discrepancia entre la cifra teórica que aportábamos al principio (dividiendo el número de votantes entre los 5 escaños en disputa) y las cifras (bastante inferiores) que nos encontramos en la realidad en algunos casos? La principal explicación es que, además de los votos y los escaños en disputa, hay que introducir en el cálculo la Ley D´Hondt y el número de candidaturas que se reparten los votos.
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Imaginemos que 100 personas votan para elegir 5 cargos. En teoría, habría que conseguir 20 votos para conseguir cada cargo. Pero imaginemos que se forman 11 plataformas electorales para concurrir a las votaciones. Imaginemos también que una de las plataformas obtiene 40 votos y las otras 10 obtienen 6 votos cada una. En virtud del sistema D´Hondt, la formación más votada se llevaría el primer diputado. Para ver quién se llevaba el segundo diputado, habría que comparar las cifras del resto de candidaturas con la de la más votada dividida por dos (por el número de cargos en liza). Como aún así la formación más votada tendría muchos más votos que las siguientes candidaturas, se llevaría también el segundo diputado, e incluso se hubiera llevado un tercero. Es decir, con el 40% de los votos se hubiera llevado el 100% de la representación porque el sistema y el número de diputados en liza premia la concentración del voto y penaliza la dispersión.
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No obstante todo lo anterior, como conclusión podemos estimar que conseguir 1 diputado en Navarra es muy difícil y que, aunque la cifra puede variar dentro de unos márgenes relativamente amplios, a la vista de los cálculos teóricos y los resultados prácticos se observa que para obtener un diputado hacen falta alrededor de 40.000 votos. Por debajo de esa cifra es casi imposible conseguir uno. Alrededor de esa cifra depende las circunstancias, la abstención, la dispersión del voto o los repartos. Sobre el papel, lo segundo mejor que una candidatura unitaria es tener varias que no queden ni muy por debajo ni muy por encima de los 40.000 votos o un múltiplo de estos. O sea, es mejor tener 2 formaciones ideológicamente afines con 40.000 que una con 50.000 y otra con 30.000, ¿pero quién puede controlar eso?
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Con esto no le estamos diciendo a nadie que vaya o no vaya a sacar 1 diputado, sino que ésa es la situación y también la cifra aproximada que tendría que alcanzar para al menos aspirar a conseguirlo. En porcentaje, para poder tener posibilidades, estaríamos hablando de alrededor de un 12-13% de los votos.
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