Comptos se ha pronunciado sobre 5 de las contrataciones en el ojo de la polémica relativa a Servinabar. O para ser más precisos sobre 4 contrataciones de Servinabar y otra de la UTE Acciona-Alegure, que ejecutó las obras del colegio público de Arbizu. Esta obra entra también en el combo porque Alegure era una sociedad de la que eran propietarios Antxon Alonso y en un pequeño porcentaje Uribene, una sociedad de la cual era propietario Iñaki Alzaga, el presidente del Grupo Noticias. De todas estas investigaciones Chivite excluyó expresamente los túneles de Velate, alegando que Comptos ya se había pronunciado a este respecto en el examen de las cuentas generales de Navarra de 2023. En aquel examen, por cierto, Comptos determinó que en la adjudicación de los túneles no se habían garantizado los principios de igualdad y transparencia.

Respecto a los 4 casos estudiados de de adjudicaciones a Servinabar, Comptos concluye que “la licitación, adjudicación y ejecución de los contratos revisados resultan conformes, en todos los aspectos significativos, con la normativa aplicable a la gestión de los fondos públicos”. Espaldarazo por tanto de Comptos a los gobiernos de Barcos y Chivite y a las adjudicaciones a Servinabar.
Comptos sin embargo realiza una pequeña matización al hablar de “Fundamento de la opinión con salvedades” en lo que se refiere a las VPO de Ripagaina, una de las obras más importantes examinadas.
Según determina Comptos:
-La mesa de contratación prevista no incluía un representante de la Junta de Contratación Pública que debiera haber participado dado el importe del contrato, ni nombraba a personas suplentes de las previstas.
–No consta ningún acta de la mesa de contratación que acredite su constitución, sus actuaciones ni sus decisiones. Comptos sólo tuvo acceso a determinada documentación intercambiada entre distintas personas con propuestas de valoraciones técnicas y económicas, sin fecha ni firma.
-Según los pliegos las empresas licitadoras no podían incluir información sobre el plazo de ejecución en el sobre relativo a criterios cualitativos. Dos de las tres empresas, una de ellas la adjudicataria, incluyeron dicha información e incurrieron en causa de exclusión.
Lo llamativo es que pese a todas estas irregularidades y todo lo que vamos conociendo de la trama de Cerdán la Camara de Comptos avale el proceso de adjudicación reduciendo todo lo por ella misma señalado a una mera «opinión con salvedades». Es como si hubiera una falta de correspondencia entre las irregularidades que Comptos detecta y cómo las califica.
Cabe recordar que recientemente la Oficina Anticorrupción emitió un informe demoledor sobre estas mismas VPO concluyendo la existencia de un «posible vicio de nulidad», señalando todas las incidencias ahora también observadas por Comptos, y determinando que «La acumulación de incumplimientos flagrantes, evidentes y palmarios en el expediente excede de meras irregularidades administrativas».
🔴🔴Comptos contradice a Anticorrupción y avala la legalidad de 4 de las 5 obras públicas de Acciona y Servinabar
— SER Navarra (@SERnavarra) October 10, 2025
Comparte con la OANA que la adjudicación de VPO en Ripagaina durante el mandato de Barkos no cumplió la legalidad recientemente aprobadahttps://t.co/1maBMlDezg
Efectivamente, resulta un tanto chocante comparar el tono firme y claro de la Oficina Anticorrupción con el lenguaje suave y por momentos evanescente de Comptos. Si según la propia Cámara de Comptos la mesa de contratación prevista de las VPO no incluía un representante de la Junta de Contratación Pública, como hubiera debido incluir, y aparte otras deficiencias “no consta ningún acta de la mesa de contratación que acredite su constitución, sus actuaciones ni sus decisiones”, ¿qué tendría que haber pasado para Comptos apreciara algo más que una “opinión con salvedades” sea lo que sea eso? ¿Que apareciera en la mesa de contratación Cerdán con un lanzallamas? De hecho a lo mejor pasó, si no hay ningún acta de lo sucedido en aquella mesa.

Lo cierto es que Comptos ya en el caso de los túneles de Velate evidenció una extraordinaria habilidad para decir sin decir, o no dejar de decir pero tampoco mojarse. No seria bueno para la imagen de Comptos que la UCO y la Justicia acabaran encontrando irregularidades en los túneles de Velate u otras adjudicaciones a Servinabar, trasladando a los navarros la pregunta de para qué sirve Comptos entonces. Comptos sin embargo se cubre las espaldas en su informe señalando que “Nuestros objetivos son obtener una seguridad razonable de que la licitación, adjudicación y ejecución de los contratos del Sector Público Foral han estado libres de incumplimientos significativos y emitir un informe de fiscalización de cumplimiento que contiene nuestra opinión. Seguridad razonable es un alto grado de seguridad, pero no garantiza que una fiscalización realizada de conformidad con la normativa reguladora de la actividad de fiscalización pública siempre detecte un incumplimiento significativo cuando exista”. O sea, que podría haber un incumplimiento significativo no detectado por Comptos.

Comptos también se cubre las espaldas al advertir que podría ser engañada y que “El riesgo de no detectar un incumplimiento significativo debido a fraude es más elevado que en el caso de que sea debido a error, ya que el fraude puede implicar colusión, falsificación, omisiones deliberadas, manifestaciones intencionadamente erróneas, o la elusión del control interno”. La Cámara también señala que “Comptos no es un órgano jurisdiccional, sino que se centra en analizar el grado de cumplimiento de la normativa aplicable y en la propuesta de recomendaciones de buena gestión pública.”.
La impresión final es que Comptos no se moja demasiado en todas estas cuestiones y que su reputación podría quedar afectada en el futuro, si la vía judicial y policial revelan chanchullos apenas discernibles entre las salvedades y apreciaciones de Comptos tan escasamente explícitas, pudiendo pensarse llegado el caso que o son extremadamente prudentes o bastante complacientes con el poder.