Era un secreto a voces. Algún nexo tenía que haber entre Antxón Alonso, el dueño de Servinabar, la empresa agraciada en la irregular adjudicación de los túneles de Velate, y Koldo García. No podía ser casualidad que Koldo llevara en su pantalón de aizkolari un anuncio de Servinabar. Tenía que haber una relación. Y efectivamente, aquí está la relación. Koldo García y Antxon Alonso eran socios en un negocio desde 2015: la cooperativa Noran.
Según publica OK Diario, Noran Sociedad Cooperativa fue fundada oficialmente el 26 de junio de 2015 por Koldo García y Antxón Alonso. La sociedad, con domicilio social en San Sebastián, tenía como objeto social la prestación de «servicios relativos a la propiedad inmobiliaria y a la propiedad industrial». Antxón Alonso, el dueño de Servinabar, la empresa afortunada a la que se le adjudica la mayor obra de Navarra en un proceso irregular, es literalmente por tanto un viejo amigo de Koldo García. Menuda casualidad.
Llegados a este punto, María Chivite cierra filas por completo en torno a Cerdán. Todo son casualidades, todo es imaginario, De algún modo en como si el PSOE intuyera que no cabe apostar por otra opción que por la inocencia de Cerdán. Si Cerdán cae, caen todos. Hay que poner por tanto la mano en el fuego por él, no por nada sino porque ya daría lo mismo no ponerla. No habrá cortafuegos que valga si se produce la caída de Santos Cerdán. No habrá manera de no acabar todos quemados si es culpable y por tanto tampoco se arriesga nada poniendo la mano en el fuego por la inocencia de Santos Cerdán. Si el impacto sería devastador sobre Moncloa, no digamos sobre el socialismo foral.
Con todos los datos ya conocidos, es evidente que el mero negacionismo no es una opción. El gobierno, tanto el central como el foral, tienen responsabilidades políticas además de penales. No puede ser que la responsabilidad de un gobernante se reduzca a que se lo lleve un día detenido la Guardia Civil. La responsabilidad política empieza mucho más acá que la responsabilidad penal y todos hemos visto cómo en Gran Bretaña un primer ministro dimitía por mentir acerca de la celebración de una fiesta, o en Alemania una ministra dimitía por los rumores de que había plagiado su tesis doctoral. Antes de llegar al poder, el sanchismo exigía responsabilidades políticas o dimisiones por cualquier insinuación emanada de sus medios, a veces con fundamento y a veces sin él. Aquí nadie dimite, ni da explicaciones ni asume ninguna responsabilidad. La consecuencia lógica de apostar por esta vía es la necesidad de negarlo todo, de poner bajo sospecha a los jueces o a las fuerzas de seguridad, de descalificar a todos los medios que publican información que desagrada al gobierno, y de levantar muros y polarizar a la sociedad o perder el poder. La consecuente degradación democrática es tan inevitable como evidente y baste para probarlo el caso de Extremadura, donde el PSOE ha comprado la renuncia de una diputada a cambio de regalarle la subdelegación del gobierno, ha hecho (sin duda a cambio de otras prebendas) que los siguientes 4 candidatos de la lista renunciaran a ocupar el escaño vacante, y que de este modo quedara aforado el sospechoso de enchufar al hermano de Pedro Sánchez a un sueldo de 55.000 euros en la administración. Todo esto yendo a trabajar a ese puesto más o menos lo mismo que Miss Asturias o la sobrina de Abalos.
No es sólo el PSOE nacional o el PSN foral quien se quema con Santos Cerdán y Koldo. Todos los partidos que son socios nacionales o forales de Sánchez son políticamente corresponsables de toda esta bomba racimo de escándalos, por no hablar de los medios que fueron azote implacable del gobierno hasta la llegada de Barkos al poder. Si en la oposición eras el azote de la corrupción y ya en el gobierno te cabe un bombardero ruso por las tragaderas, se demuestra que eras un farsante cuando estabas en la oposición, que lo que te preocupaba era llegar al poder y no la corrupción, que simplemente utilizabas las denucias de corrupción para alcanzar el gobierno, que no era el qué sino el quién, y que cuando empieza a oler raro a tu alrededor ahora que tienes el poder es mucho más fácil que ser coherente echar mano de una pinza tamaño Koldo para tapar la nariz.
