Anda mi hija mayor haciendo un trabajo sobre el sufragio femenino en España…
Uno sabía de oídas que los primeros en pedir el sufagio femenino en España fueron los carlistas. Pero sólo lo sabía de oídas.
Con lo del trabajo de mi hija me he puesto a buscar y he conseguido al menos una demostración documental de esto que afirmo.
En 1914 el gran político carlista D. Juan Vazquez de Mella concedió una entrevista al periódico «El Correo Español- El Pueblo Vasco» donde se refería a este asunto. Sin embargo, buscando por hemerotecas en Internet no he conseguido encontrar ninguna con ejemplares de dicho periódico tan antiguas.
Si que he encontrado en la Biblioteca Virtual de Prensa Histórica lo que parece ser un extracto de aquella entrevista en el otro periódico. Aquí la podeis ver, y aquí va el interesante extracto:
«Reforma del parlamentarismo, del régimen representativo, concediendo voto a la mujer. Esto sorprenderá a los radicales, pero yo creo que la mujer salvo en los asuntos del ejército y del clero deben tener intervención. En la Industria, en la Agricultura, en el Comercio es justo que la tenga.
Si los socialistas belgas no le reconecen este derecho es porque quieren que las mujeres sean laicas.»
Por supuesto los que no querían tal cosa eran los amantes de las libertades y la democracia, con los socialistas en primer plano.
Un comentario
Entiendo que este es uno de esos ejercicios clásicos de «en realidad nosotros somos los buenos, porque defendimos lo mismo que la izquierda antes que ella».
Que se traduce por: «la izquierda es la dueña de lo bueno y lo malo».
Es una práctica constante de las derechitas domesticadas, tanto aquí como en todo el resto del mundo europeo-occidental.
Es importante entenderlo bien: somos buenos no por nosotros mismos, sino «porque suscribimos los principios del progresismo antes que ellos»…
Es decir, que ellos son los árbitros de nuestra moral colectiva y únicos transformadores legítimos de la sociedad.
Lo de siempre, una vez, y otra, y otra…
¡Supercarlismo!