A lo tonto y como quien no quiere la cosa llevamos ya tres años en este rincón del ciberespacio sembrando confidencias, primicias, reflexiones, doctrina, ironías, aplausos y collejas. Hemos procurado en este tiempo informarles y formarles divirtiendo, o divertirles informando y formando. Todo un poco mezclado con agilidad que para eso somos como la caballería ligera de las fuerzas periodísticas del Reino.
A veces, en alguna de esas incursiones por el campo de la novedad que linda con el futuro hemos provocado algún que otro estropicio colateral. Una vez más, por si sirve de consuelo, hemos de manifestar nuestras disculpas más sinceras porque en ningún caso hemos pretendido causar daño a nadie. No tenemos nada personal contra ninguna persona física. Ni contra los "peces gordos" ni contra los chicos. Ni contra el más orgulloso consejero ni contra el más humilde tragador de televisión. En todo caso hemos procurado distinguir la idea de la persona. Y cada vez que oímos esa estúpida idea de que no hay ideas estúpidas nos reafirmamos en la idea de que algunas ideas son estúpidas. Porque quienes somos dignos de respeto somos los seres humanos, imagen sagrada del Creador incluso cuando decimos estupideces. Las ideas, en cambio, pueden ser o no respetables según coincidan o no con la verdad de las cosas. Así que con esto y un breve chin-chin a su salud damos por celebrado este aniversario. Nos veremos por ahí, tratando de escudriñar la verdad de cada día, procurando pescar ideas buenas. A ver si con una y con otras nos hacemos mejores personas.
Jerónimo Erro