Diario de Noticias recordaba ayer la elección del socialista Julián Balduz como alcalde de Pamplona en 1979. Las similitudes aritméticas resultan efectivamente llamativas. Al igual que Navarra Suma, UPN y UCD consiguieron en aquellas elecciones 13 concejales. Al igual que Bildu, Batasuna obtuvo 7. Al igual que Geroa, el PNV obtuvo 2. Y al igual que ahora, el PSN obtuvo 5. Con aquellos resultados, los mismos que ahora, Batasuna y PNV votaron por Balduz para evitar un ayuntamiento de la derecha. Balduz mantuvo la alcaldía hasta 1987 lo que confirmaría la bondad de la fórmula.
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Antes de cualquier otra reflexión, quizá merezca la pena detenerse un momento en el propio hecho de que en 1979 la distribución de fuerzas fuera la misma que ahora. A veces pensamos que la sociedad da grandes vuelcos y a veces parece que después de 40 años todo sigue igual.
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Respecto al antecedente histórico de Balduz, el relato del Noticias omite que Batasuna y PNV, los mismos que habían colocado en la alcaldía a Baulduz en mayo del 79, le presentaron una moción de censura en diciembre del 81.
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La razón para que Batasuna y PNV presentaran la moción de censura fue la decisión de Balduz de quitar la ikurriña del balcón del Ayuntamiento en los Sanfermines de aquel año de 1981. La decisión fue seguida de graves altercados en el orden público de la ciudad y políticamente por esa moción de censura, que Balduz superó porque recabó el apoyo de UPN y la abstención de UCD. En aquel momento, por cierto, el PSN todavía era una agrupación del Partido Socialista de Euskadi.
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No es la única omisión que comete el relato del Noticias.
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Batasuna y PNV presentaron otra moción de censura contra Balduz en marzo del 82. Una vez más la moción para echar a Balduz fracasa por el apoyo de UPN.
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Significativamente, en aquel mes de marzo hubo otra moción de censura contra Balduz, pero en este caso de UCD. La moción de UCD fracasó por el apoyo a Balduz de Batasuna.
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PNV y UCD votaron contra Balduz en las dos mociones de censura de marzo.
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Batasuna votó a favor de su moción de censura y en contra de la de UCD.
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UPN votó en contra de la de Batasuna y se abstuvo en la de UCD.
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Es verdad que Balduz aguantó como pudo la legislatura y resultó reelegido tras las elecciones de 1983. La elección del alcalde de Pamplona en aquel año, no obstante, vino marcada por el empate a 11 votos entre Balduz y Juan Cruz Alli, el candidato de UPN. El empate entre candidatos se resolvió a favor de Balduz porque el PSN tenía más votos.
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El ejemplo de Balduz no resulta por tanto nada pacífico. Es verdad que ante una situación aritmética equiparable a la de ahora consiguió la alcaldía con sólo 5 concejales y el apoyo de PNV y Batasuna. pero no es menos cierto que tuvo que afrontar 3 mociones de censura en menos de 3 años, 2 de ellas presentadas por Batasuna y PNV, los mismos que le habían aupado. ¿Es esto a lo que tendría que enfrentarse Esporrín? En vez de un pacto, ¿una sucesión de mociones de censura es el escenario de gobernabilidad que se nos propone como modelo? Si el modelo es Balduz, ¿cuánto tardarían Bildu y Geroa en presentarle una moción a Esporrín?
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4 respuestas
Es efectivamente muy llamativo que después de 40 años el pleno de Pamplona haya llegado al mismo punto. Es muy curioso: a pesar de toda la gente que ha nacido y fallecido en estas cuatro décadas, el paisaje ideológico no se ha movido un milímetro. Daría para un estudio sociológico, o antropológico.
Por otro lado, yo no descartaría que Esporrín fuese alcaldesa exactamente de la misma manera. Y exactamente de la misma manera, ella y el PSN no podrían dejar de aceptar los votos.
Una vez más, Bildu está frente al espejo: o permiten un alcalde de la derecha o una alcaldesa del PSN. Estas contradicciones van a hacer polvo a la izquierda abertzale. Esa idea me place.
Espera un momento
¿Estamos igual que hace 40 años?
Eso es imposible.
A mi los nacionalistas vascos de Pamplona me han dicho que cada día son más y los de derecha nos vamos a extinguir.
Y ellos nunca mienten.
Obabatarra: a Vd. lo que realmente le place es que gobierne el PSOE en Navarra y en Pamplona a cualquier precio (made in Snchz), deje de envolver la perdiz con papel de color Bildu o de contradicciones abertzales que el pájaro ya está mareado.
De entrada el personaje investido como “hombre de paz” por ZP, ya ha dicho que a Navarra + no le va a votar Bildu, pero votar al PSN lo está pensando. Por lo tanto, como lo que haga Otegui no puede ser bueno para Navarra, si vota o se abstiene a favor del PSN… blanco y en botella. Vd. estará feliz llegado el caso, pero déjenos en paz y no nos haga comulgar con ruedas de molino.
Diría que hay que diferenciar entre los ejes de nacionalista-no nacionalista y derecha-izquierda.
La distribución de las fuerzas en el nacionalista-no nacionalista se mantiene estable como Vds. señalan en el artículo al tener los partidos los mismo resultados.
En cuanto al eje derecha-izquierda sí que ha habido un gran movimiento. El eje se ha escorado a la izquierda, por lo que lo que antes podía ser considerado izquierda hoy se considera derecha. UPN y PNV son mucho más de izquierdas que hace 40 años.