Las alternativas de Feijóo son o gobernar con el sanchismo o gobernar con VOX. Salvo que el PP consiga la mayoría absoluta, claro está. El problema es que ninguna encuesta le da al PP la mayoría absoluta. Podemos desechar todas las encuestas y pensar que pese a todo es posible una mayoría absoluta del PP, pero entonces también Abascal puede desechar todas las encuestas y pensar que es posible una mayoría absoluta de VOX. O también Yolanda Díaz puede pensar que va a obtener 200 diputados pese a lo que proyectan las encuestas. Una cosa es prescindir de las encuestas y otra muy distinta prescindir de la realidad.
#España 🇪🇸 – Sigma Dos (25J): la suma de PP 💧 y Vox 🥦 pierde la absoluta.
Sumar ➕ da el sorpasso a Vox 🥦 y araña varios diputados clave.
Lucha encarnizada entre ERC 🍋 y Junts 🍈, y entre EH Bildu 🍃 y PNV 🍇.
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— EM-electomania.es (@electo_mania) June 25, 2023
La realidad es por tanto que o el PP gobierna con VOX o gobierna con el sanchismo. O sea, si no quieres pactar con VOX y no tienes mayoría absoluta, ¿cuáles son las opciones? ¿Volver a convocar elecciones una y otra vez? ¿Pactar con Sánchez? ¿Pactar con los separatistas o con lo que está a la izquierda de Sánchez? O te presentas a las elecciones con el mensaje de que quieres desalojar del poder al sanchismo o con el de que puede que acabes pactando con él, no hay otra opción. Y para desalojar del poder al sanchismo es necesario VOX. Si la izquierda criminaliza constantemente a VOX es porque la izquierda sabe sumar, ¿acaso es que Borja Semper no sabe sumar? ¿Qué hace entonces una parte del PP sumándose a esa campaña de criminalización? Lo estamos viendo claramente en Extremadura: o desalojas al sanchismo o criminalizas a VOX. No puedes hacer las dos cosas a la vez.
El portavoz de campaña del PP, Borja Sémper, también quiere ser Guardiola.🤷♂️
Ya nos explicará Feijóo con quién quiere sumar entonces después del 23-J para formar gobierno. pic.twitter.com/fsQqzxOi1z
— Luis del Pino (@ldpsincomplejos) June 25, 2023
Tras las autonómicas y municipales, un Pedro Sánchez a la desesperada había pensado convocar elecciones en unas fechas extemporáneas, arrojar sobre el electorado sus últimas reservas de millones y pasearse por todos los medios afines, que son casi todos, para inundar a sus audiencias de entrevistas-masaje. Pero no está haciendo falta nada de eso. De hecho, todo lo que está haciendo Pedro Sánchez está pasando totalmente desapercibido. De lo único que se está hablando es de la división de la derecha, de su incapacidad para alcanzar pactos y de que los pactos con VOX, según el propio PP, son pactos con el machismo, la homofobia y el racismo. Nos encontramos ante la peor campaña electoral de la historia de la derecha y las encuestas ya empiezan a reflejar las consecuencias. O el PP endereza el rumbo o tenemos sanchismo para rato.
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Borja Sémper (PP): “El futuro en Euskadi se tiene que construir también con Bildu” http://t.co/tU8WkxJB
— Arnaldo Otegi 🔻 (@ArnaldoOtegi) January 5, 2013
Dentro del PP, por otro lado, la división también resulta evidente. Aparte del PP de la Comunidad Valenciana, o del PP balear, o de los cientos de ayuntamientos en los que ha prosperado una alcaldía impulsada conjuntamente por el PP y VOX, la propia Ayuso incluso desde su mayoría absoluta declara abiertamente que hay que pactar con VOX. ¿Con quién está Feijóo? ¿Con Ayuso y con todo el PP que quiere pactar con VOX el final del sanchismo o con Guardiola, Semper y esa parte del PP que quiere pactar con el PNV o incluso con el PSOE para hacerle un cordón sanitario a VOX?
Isabel Díaz Ayuso: "En este momento decisivo hay que encontrarse con Vox para ser alternativa”. pic.twitter.com/LiVKffAA1s
— Pedro Otamendi (@PedroOtamendi) June 25, 2023
A estas alturas casi todo el centro derecha puede lamentar que sea Feijóo y no Ayuso quien lidera el PP, una situación que por otro lado y de cara a futuras elecciones, si Feijóo no sabe desalojar al sanchismo se puede corregir. El problema es que España no puede esperar 4 años más para desalojar a Sánchez del poder. Observando a Feijóo, Guardiola o Semper, da la impresión que casi recibirían otra mayoría sanchista como un alivio, para no tener que mojarse, para no tener que elegir, para no tener que pactar nada con VOX y recibir la desaprobación de La Sexta o El País. Los electores de la derecha merecen unos dirigentes de la derecha que busquen su aprobación.
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