Cuando se creían que las tenían enmudecidas por la subida de alimentos básicos, de luz, de gas, de electricidad, de transporte… cuando algunos se creían que habían conseguido aislarlas en sus miniviviendas, amenazarlas con suspender a sus hijos si objetan de falsas ciudadanías, obligarlas a llevar a sus infantes a las guarderías recien nacidos y a sus dependientes a los asilos…van las familias y se reúnen y cantan y proclaman que las familias siguen vivas, como sus hijos, como sus enfermos, como sus ancianos.
Y claro, a los que no quieren la libertad para todos, les molestó lo que pasó en Madrid, como les molesta que les recordemos que el "Bienestar Social" necesita primero del "Bienestar Familiar" para ser eficaz. Porque ese es el asunto, la Familia cristiana, fuente de solidaridad, de paz y de acogimiento, se ha hecho notar públicamente porque a veces eso es necesario. Y eso es para algunos como Pepe Blanco o Carmen Chacon o el sr. Bermejo… un peligro. Si las familias se unen habrá que pensar en ellas en los próximos comicios. Si las familias están presentes en las calles, en los medios, en el día a día de la vida social… habrá que tenerlas en cuenta, legislar convenientemente por el bien de ellas y darse cuenta de que: !existen! !se manifiestan! !conocen sus derechos y los defienden!.
Comprendo el rebote que ha supuesto para algunos tener que reconocer que la familia importa, que va a seguir importando porque está llena de vida y además lo proclama sin pudor, deben estar frotándose todavía los ojos pero ha sido real y creo que vamos por el buen camino. Yo no fui a Madrid, me uní al Arzobispo de Pamplona y desde la Catedral navarra, rezamos todos por las familias de Madrid y vivimos el mismo ambiente, familias, familias de la tierra, de nacimiento o de adopción, de unos movimientos y de otros, de unas parroquias y de otras, de situaciones y edades muy distintas pero unidos en lo importante.