No voy a reiterar el acierto de Miguel Sanz y del Consejo político de UPN, al que no pertenezco, que ha situado al partido en dos temas fundamentales: garantizar en el futuro la gobernabilidad de Navarra en el entente UPN-PSN, -deseada por la mayoría de la sociedad navarra y también de los sectores productivos sociales y sindicales-; y recuperar la presencia de UPN en la política nacional perdida desde hace mas de 8 años.
Estos deseables y justos objetivos, han desatado los mas acervos e injustos ataques, llegando al insulto, no solo a Miguel Sanz y a UPN, sino incluso a Navarra por algunos comentaristas y medios de comunicación escritos y visuales, de tal bajeza, que expresan, en algunos, el declive y la degeneración del genero periodístico.
Por lo que pueda afectar a algún sector del electorado y de los responsables políticos, si me parece importante aclarar que yo creo que UPN no incumple el Pacto y que no ha roto ni va a romper ningún acuerdo de colaboración electoral. Sin embargo parece que los nuevos dirigentes del PP, sí desean romper el Pacto y reinstalarse en Navarra, acabando con la unidad del centro derecha. El comunicado del PP nacional lo corrobora.
Solo deseo aportar a estas afirmaciones evidencias El Pacto UPN-PP de 1991 dice en su apartado segundo:”El presente pacto implica el respeto del PP a la plena personalidad jurídica de UPN y a su total soberanía en la toma de decisiones que afecten a la Comunidad Foral de Navarra. Así mismo el PP se compromete a defender en cuantas instituciones nacionales y supranacionales se encuentre representado, el criterio de UPN a cerca de los derechos e intereses generales de la Comunidad Foral”. El comunicado del PP oculta este apartado..
Y el Pacto de 1991 continúa en el apartado Tercero b: “Los parlamentarios de UPN en las Cortes Generales darán su voto favorable al candidato a la presidencia del Gobierno de la Nación que designe el PP”. Este es el único compromiso de voto unitario de UPN con el PP y no cualquier otro que le interese al PP como es el caso de la enmienda a la totalidad.
El acuerdo electoral conocido y firmado por Rajoy en 2007 en desarrollo y aclaración del Pacto dice: “Para situaciones especiales que afecten al interés general de Navarra y a la gobernabilidad de la Comunidad Foral y siempre y cuando no colisione con el interés general de España y con los principios ideológicos de este acuerdo los diputados y senadores de UPN fijaran su posición de voto priorizando los asuntos de interés general de Navarra y la gobernabilidad de la Comunidad sobre los de carácter partidista y estratégico”
La actual situación de ataque mediático contra UPN solo se puede explicar como orquestación al deseo del PP de romper con UPN por las razones que se pueden leer en el comunicado del PP, que alegando a que se disolvieron en Navarra concluye en el punto 3º: “Es absolutamente irrenunciable para el partido popular garantizar la presencia de nuestro proyecto político en todo el territorio nacional y por tanto en Navarra”
Cualquiera que esto lea lo entiende. La abstención a la enmienda a la totalidad por parte de los diputados de UPN no se opone al Pacto solo quiebra, en los nuevos dirigentes su convencimiento y orgullo de que no dominan a UPN y que no existe el PP en Navarra.
Por ello la conciencia del voto de los diputados de UPN en materia que no afecta a la ética ni a la moral, sino a la estrategia política, solo puede entenderse en la desviación de objetivos personales de futuro, orientados en el ámbito del partido popular.
Si no se cree en lo pactado un nuevo acuerdo entre UPN y PP parece necesario e imprescindible a través de la cláusulas de rescisión o de renovación previstas en el Pacto. De estable y permanente, nada de nada.
José Javier Viñes
Ex Senador por Navarra de UPN
Ex Senador por Navarra de UPN
