Que el primer partido navarro o que el primer periódico de la región hayan decidido hacer la vista gorda ante el tic tiránico de moda: la asignatura de “Educación para la Ciudadanía” ya no me escandaliza. Al fin y al cabo es coherente con la estrategia que han decidido, entre otros, dos amigos corellanos uno de los cuales, gran empresario, es amigo de un famoso político leonés.
Todo este planteamiento resulta para mi gusto demasiado germanófilo: primero fue el pacto “a la bábara” UPN-PP y ahora, un pseudopacto “al estilo Merkel” en el que lo importante, -piensan los estrategas del centro-derecha-, es que no se hundan nuestros compañeros constitucionalistas”. Es enternecedor. Ojalá UPN pusiera tanto empeño en la batalla de la cultura y la juventud como lo pone para dar oxígeno al PSN y al partido de Alli.
Ahora bien. Lo que SI me produce vergüenza ajena es ver que todo el coro de esos grupos y grupitos libertarios que van de rojeras y de antifascistas están recibiendo a la EpC como si fuera ella el colmo de la autogestión popular. Y dejan la resistencia a la tiranía en manos de los católicos y de los carcas. Se creen que nos oponemos a la EpC por anti-católica y no saben que es anti-persona. Están haciendo el ridículo.
Jerónimo Erro