Susana Díaz estudia un adelanto electoral en Andalucía, pues los movimientos de IU le están empujando a ello; Pedro Sánchez parece que lo tiene cada vez más difícil de cara las elecciones locales y autonómicas. Podemos no deja de confirmar que han llegado de momento para quedarse, ya que una y otra encuesta les confirman un buen número de votos. Los nacionalistas de todos los pelajes también están nerviosos, pues Podemos les quitan parte de los votantes más jóvenes y contestatarios, y la recuperación económica también les perjudica, pues España ya no se percibirá como un lastre. Rajoy se está pensando si le conviene unir las autonómicas catalanas del 27S con las elecciones generales, y así terminar por hundir a Mas y acompañantes.
¡Quién dijo que 2015 iba a ser un año anodino! De eso nada, la cosa se anima por momentos. Los datos del consumo de las pasadas Navidades confirman que el consumo interno empieza a despertar, y el contexto de los precios del petróleo, la bajada del euro, etc, empujan hacia la creación de puestos de trabajo. Hasta la izquierda lo reconoce, aunque siempre critican mirando por el retrovisor hacia tiempos pasados que de momento no son repetibles, pero todos sabemos que la cosa mejora.
Lo que es verdad es que todos los partidos están reaccionando tarde y mal. Todos caen en el “sonsonete” de hacer procesos participativos tecnológicamente muy guay, para la confección del programa, previa consulta a las bases. Pero después de una crisis tan larga, nos les quedará más remedio que remangarse y dar mamporrazos a diestro y siniestro a cara perro. Los del PP van a intentar asustarnos con que viene el coco y que ellos son los únicos que lo pueden parar y sostener un discurso español frente a los independentistas. Si los del PSOE se colocan como terceros, no levantaran cabeza y se quedaran como un partido andaluz. Los de IU están en trance de desaparecer o hacia la marginalidad. Buena noticia es que C´s puede rebasar y enterrar a UPyD. En Navarra mucho está tardando Esparza para marcar su territorio, e iniciar el camino de la recuperación del voto perdido de centro derecha. ¡Esto se anima!