Puras, en vez de los 2 ó 3 días de los que ayer hablaba Sanz, ha arrancado todo un mes más para implicar a UPN en el juego de seguir mareando a todos los navarros. UPN, que había quedado al margen de la imagen de insolvencia de los socialistas y los nacionalistas con sus inútiles e inacabables idas y venidas, ha recuperado su perfil más bajo y ha vuelto a tragar el anzuelo.
La única razón por la que el PSN no ha pactado con los nacionalistas es porque, con las encuestas en la mano, así se lo han ordenado a Puras desde Madrid. En cuanto se celebren las elecciones generales, no sólo habrá desaparecido la única razón que impedía el pacto con los nacionalistas, sino que el PSN tendrá una ocasión de oro para reconciliarse con sus votantes y militantes derribando el gobierno de UPN. Sanz, que no debe conocer el cuento de la rana y el escorpión, pretende cubrirse haciendo firmar un compromiso al hombre que dejó grabado para la historia lo de que “no, ya le digo yo que no” cuando se le preguntó si aspiraría a ser presidente en caso de quedar el tercero.
No sólo eso, es evidente que la dificultad para el PSOE es que el PSN coincida con los nacionalistas en el gobierno, no que coincida con ellos en la oposición. Con un comité regional que votó 104 a 1 a favor del pacto con Nabai, los socialistas necesitan ser ahora muy agresivos con UPN para aplacar a su propia gente. Un gobierno en minoría de UPN sería un gobierno totalmente precario. Navarra, de hecho, podría ser gobernada desde la oposición.
En este escenario, con un 48% de los votos y nada que perder, UPN y CDN no deben conformarse con un gobierno precario o que pueda ser derribado en cualquier momento por una llamada de Moncloa. UPN y CDN, formando coalición, deben ser valientes y ofrecer a los navarros la posibilidad de elegir entre un gobierno estable y el caos.
En esas nuevas elecciones, UPN se podría presentar ante los navarros como la única alternativa coherente. PSN y Nafarroa Bai ni siquiera sabrían con qué cara presentarse a unas nuevas elecciones, porque después de demostrar su total incapacidad para pactar tampoco pueden presentarse esperando poder gobernar sin pactar.