Fernando Puras ha dicho que le gustaría que ese hipotético gobierno de concentración foral que ha propuesto Miguel Sanz no excluyera al nacionalismo vasco porque “No sería correcto sumar a unas fuerzas políticas frente a otro bloque, el nacionalismo vasco”. Aparentemente parece que nos da la razón teniendo en cuenta que en la "clave" anterior pedíamos a Sanz que invitara también a los de Anexioa Bai, para que en todo caso sean ellos quienes digan "ez", y porque excluirlos sin más sería darles importancia.
Sin embargo algo no encaja en las palabras de Puras. La propuesta de Miguel Sanz de un gobierno de concentración foral sonaba medio bien en boca de alguien no excesivamente ideologizado. Pero si en vez de un Gobierno formado por NAVARROS diversos (y más bien independientes) nos imponen un gobierno de IDEÓLOGOS diversos apaga y vamonos. Puras ha dicho que le gustaría que "estuvieran representadas todas las sensibilidades políticas de la comunidad". No habla de "navarros" sino de "sensibilidades" o de "fuerzas políticas". Es una forma cursi de decir que le gustaría un gobierno no de todos los navarros sino de todos los partidos.
No se si esta gente será capaz de captar la diferencia entre una y otra opción pero a mí la segunda, la de todos los partidos a mogollón, descuartizando la administración en el reparto de consejerías, no me suena a "unión diversa" sino a "partición uniforme", es decir, a partido único. Porque la cuestión, amigo Puras, no es juntar con calzador a todas las "sensibililidades" o "fuerzas" políticas, sino ver si somos capaces de prescindir de esas sensibilidades y esos prejuicios ideológicos para buscar entre todos el bien común.
No. No estamos de acuerdo en el ideal porque antes que navarros son comunistas, o socialistas, o euskadianos.
Jerónimo Erro