El “si” gana por mayoría aplastante y contundente en los referéndums de independencia que han tenido lugar en Cataluña el pasado día 25. No obstante, hay que decirlo todo, sólo han votado un 17 % del censo electoral y en una ciudad muy significativa como es el caso de Lleida, solo el 6,82 % de los posibles electores se acercó a las urnas.
Suponemos que los organizadores usaran el sentido común y se den cuenta que los catalanes, también yo estoy censado, no estamos dispuestos a estas experiencias inconstitucionales. Menos de 1 de cada 5 posibles votantes, votó. Si, repito, se actúa con sentido común se dejará correr, pues el resultado muestra que no llega ni a fracaso, se queda en desastre. Es una clarísima muestra de que la independencia no está entre las preocupaciones ni prioridades de los catalanes.