El mundo no se va a parar porque durante unas semanas deje de publicarse este pequeño confidencial. En los próximos días puede que se produzcan o conozcan nuevos terremotos, nuevos estallidos indignados, nuevos extraños pactos políticos, nuevos panfletos terroristas, nuevos y estresantes cambios. Nosotros, para aprovechar la paz relativa de esta época, entre toros y charanga, nos aferraremos a lo que permanece, a los libros, a las magras con tomate de las madres (que son unas santas), a la liturgia festiva incluida la religiosa. Reflexionaremos para tratar de llegar cada vez más y mejor a las tripas de la actualidad, para descubrir, descubrirnos y descubrirles a Vds. qué es lo que realmente está pasando y hasta qué punto lo que pasa es consecuencia de planes o teorías previas. Repasaremos para tomar buena nota algunos de los mejores artículos publicados en esta web como la interesante serie de Ricardo Guelbenzu, por ejemplo, y hasta es posible que volvamos a leer algunos de los chispeantes comentarios de nuestros lectores más descarados, que de las críticas también se aprende mucho. Todo eso y más para que a mediados de agosto seamos capaces, por lo menos, de mantener el nivel y su atención. Gracias.