Anda que lo del monumento al encierro va a dar para más que el propio encierro; gracias a que no es más que una broma, y el “ENCIERRO” de Pamplona, nuestro encierro, el de las Fiestas por excelencia en el mundo entero, se salva de estas polémicas que se encuentran fuera de lugar.
Las crónicas cuentan que en los siglos XVII y XVIII ya se realizaban encierros y toros. El Monumento de D. Rafael Huerta tiene pocos años, y levanta polémica, y después de haber levantado a muchas personas a los lomos de sus morlacos, ahora levanta un seto.
Pero “con la que está cayendo”, todos piensan si el seto lo pueden poner ellos, seguro que son capaces, que somos capaces de hacer por menos de TREINTA MIL EUROS, coño, ( y perdón ) qué vergüenza.
No serían mejor a la Escuela Navarra de Teatro, a mil asociaciones, eventos, o a muchos y muchos pamploneses y pamplonesas, QUE SE MUEREN DE HAMBRE, claro que después de la cantidad de obras públicas ejecutadas en Pamplona, etc., (peatonalización de calles, cambios de pavimento), no es de extraño esto, pero no olvidemos que en la calle duerme mucha gente, que ni tan siquiera como, gente de Pamplona, que podrían recibir ayuda o poner el “setito” por mucho menos dinero.