Por supuesto, que quiero referirme a la nueva emisión de facturas por el servicio sanitario que desde el Departamento de Salud se va a llevar a cabo. Por un lado, y como paso previo, se trata del mismo Departamento Público que se prepara para ahorrar costes de todas las maneras posibles.
Ahorrar en gastos farmacéutico (dándonos menos medicamentos), ¿pero no recibimos lo que necesitamos?, pues es por ahí por donde podemos empezar, pero ahorrar no su pone menos, supone lo necesario, supone consumir racionalmente, lo que se está consiguiendo es que el medicamento al que se le aprieta tanto en costes, reduce el principio activo que es el caro, pero el efectivo y aumenta el excipiente. Ahorrar en personal, reducir las contrataciones en concepto de sustitución, ¿en qué beneficia al paciente?.
Pero vamos a la novedad, las facturas, la emisión de facturas para que sepamos los costes del servicio sanitario, ¿quizás consideren que no valoramos adecuadamente las atenciones sanitarias?, ¿quizás se piensa que alguien va al médico por gusto?, de todas maneras, de que sirve, si no lo vamos a pagar, que por otro lado, (no olvide nadie, que ya lo hemos pagado con creces) que lo seguimos pagando con impuestos directos y con indirectos.
Los servicios administrativos que se van a dedicar a la emisión de esas «facturas informativas», ¿son gratuitos?. Concienciar del coste para llevar a cabo un «consumo responsable», no es mala idea, pero que esta manera de dar a conocer lo que cuesta a toda la sociedad el coste sanitario, no creo que sea la más acertada. ¿Se imagina alguien, si después de recibir, «lo que tofos conocemos como carísimo», el desencadenante es un desagradable óbito? , ¿Qué tal puede caer una factura que recuerde además que ha costado mucho dinero?
No, no es la manera de recordar al ciudadano el coste de la sanidad pública. De empezar así, en vez de puntos kilométricos en las carreteras, aparecerán los miles y miles de euros que ha costado la carretera por la que circulamos; y así todo lo que se les ocurra. Pero como ¿es que no lo pagamos?, entonces ¿por qué tienen que recordárnoslo?, podrá alguien recordar lo que pagamos al resto del día en impuestos, sobre lo consumido, ¿podemos tener elección?, no verdad, pues entonces recordarnos que cuesta una medicación que necesitamos está fuera de lugar.