Este fin de semana se celebra en Pamplona una Jornada sobre Católicos y Vida pública cuyo objetivo principal apunta a reflexionar sobre coherencia. Porque yo deduzco que de eso va el asunto ¿no?. Cuando tan a menudo se nos habla de ciudadanos y ciudadanas ¿a quién se refieren? Al que está leyendo esta carta, al que la ha escrito, al que la ha publicado…. y así en todas las situaciones, todas tienen de protagonista a personas concretas. Yo creo que un ciudadano es aquel al que nada le es ajeno a su alrededor, mejor dicho al que nadie le es ajeno. Y por eso se implica, y por eso vive a tope y manifiesta con su vida lo que cree. Y por eso nadie es ciudadano de primera o de segunda. Eso es lo que a mí me gustaría dejar como herencia a mis hijos, una coherencia entre lo que pienso y lo que vivo, una coherencia de saber que mis hermanos son todos los demás hombres, y vivir en consecuencia, y que entre todos podemos mejorar tantas cosas…. pero sobre todo mejorarnos unos a otros. Y por eso me parecen muy oportunos los temas elegidos para esta Jornada: Vida pública, Medios de comunicación y Familia. Los tres temas nos afectan a todos, mejor aún, creo que todos amamos esos tres temas. Pienso que será muy interesante lo que allí se oiga pero que lo más interesante será lo que cada uno pueda aportar a continuación, pues de eso se trata de sabernos ciudadanos y ejercer como tales.
