Los delitos de pederastia en algunos sacerdotes y religiosos están siendo machaconamente tratados. La Iglesia considera la pederastia como un “crimen abominable”, y tanto el Papa Juan Pablo II como Benedicto XVI han pedido “tolerancia cero”, lo que ha motivado la dimisión de cargos eclesiásticos, como se ha visto recientemente en Irlanda. Lo que no entiendo es que en España se haya rebajado la edad para mantener relaciones sexuales consentidas a la edad de 13 años, pues se trata de menores. En donde más casos de pederastia se dan es en la familia y en maestros; pero no por eso dejamos de confiar en la institución familiar y en el Magisterio. Según datos de las autoridades en Austria, en un mismo periodo, los casos comprobados en instituciones relacionadas con la Iglesia son 17 y 510 en ambiente ajenos a la Iglesia. Un solo caso es condenable. Como cristiana, no apoyo mi fe en los sacerdotes ni en los religiosos sino en Jesucristo, que fundó la Iglesia y le envió el Espíritu Santo. Los sacerdotes han sido y siguen siendo, en general, dignos de nuestra confianza.
