En declaraciones realizadas al diario de tirada nacional, la ministra de Igualdad aseguró que “Educación para la Ciudadanía es una materia imprescindible que incluye aspectos específicos sobre violencia de género, salud sexual y reproductiva y respeto a la diversidad”. Igualmente, la ministra destacó que el Ministerio de Educación está realizando unidades didácticas relativas a la formación afectivo-sexual.
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Ante tales afirmaciones se puede apreciar que es evidente que con Educación para la Ciudadanía no se trata de transmitir valores constitucionales ni de Derechos Humanos, como pretenden hacernos creer. Se trata, más bien, de introducir cuestiones morales controvertidas a través de una asignatura obligatoria y evaluable.
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Pienso que estos hechos muestran, una vez más, que los padres tienen todo el derecho de denunciar ante los tribunales de lo Contencioso-Administrativo libros y materiales didácticos que impongan una determinada moral, es el caso, tal como recientemente ha establecido el Tribunal Supremo.