El asunto del famoso mapa de la ETB lo veo yo como si, de repente, un día descubres que el vecino lleva una foto de tu mujer en su cartera. Y tú, ¿qué narices haces con una foto de mi mujer en tu cartera? La solución adoptada por el nuevo gobierno vasco, en vez de sacar a Navarra de su mapa del tiempo, es como si el vecino, en vez de quitar la foto de nuestra esposa, intenta tranquilizarnos añadiendo a la de nuestra mujer las fotos de otras cuantas mujeres casadas con otros vecinos del inmueble. No sé exactamente cuál sería la manera correcta de responder esta iniciativa del vecino en una sociedad civilizada. Una forma posible sería empezar a usar la corporeidad de este singular vecino como paragüero.
Y es que me da la impresión de que, para el gobierno vasco, cualquier solución posible pasa, de una u otra forma, por el mantenimiento de Navarra dentro del mapa del tiempo. Lo cual también es, de una u otra forma, la base del problema. Un problema que al parecer persiste, siquiera atenuado, incluso aunque los nacionalistas pierdan el poder en el País Vasco. Yo al presidente Sanz le recomiendo que a su reunión con Patxi López lleve un paraguas por si acaso. Por si acaso llovizna, claro.
.
.
Marcos Andía.