Hacerse Indar Gorri como salida a los instintos de violencia

Los Indar Gorri han vuelto a liarla. Pero esta vez no en Pamplona. Es más, han participado en una batalla campal con el pretexto de un partido en el que ni siquiera jugaba el Osasuna. Los Indar Gorri, al menos algunos de ellos, se fueron el pasado fin de semana a Burgos a un partido entre el Burgos y el Zaragoza, uniéndose a los ultras de Resaca Castellana frente a los ultras zaragozanos de Ligallo.

Indar Gorri se alía con los ultras del Burgos para protagonizar una nueva batalla campal https://t.co/ymXswgKxgB

— Navarra.com (@navarra_com) November 29, 2022

La frecuencia de las acciones violentas en que se ven envueltos los Indar Gorri está alcanzando tal velocidad que para cuando se detiene a los implicados en un altercado anterior ya se ha producido otro altercado nuevo. Para cuando se han producido las últimas detenciones de Indar Gorri por los altercados en Pamplona con los ultras del Valladolid, ya la han vuelto a montar en Burgos. ¿Dónde volverán a liarla para cuando detengan a los de Burgos?

Ascienden a 11 los detenidos en Pamplona y Valladolid por los altercados previos al partido Osasuna-Real Valladolidhttps://t.co/8wnox7q1kP

— Diario de Noticias (@NoticiasNavarra) December 2, 2022

Lo que una vez más pone de manifiesto todo esto es que las peñas ultras no tienen nada que ver con el deporte sino con la política. Y puede que ni siquiera realmente con la política. Con el deporte desde luego no, salvo que el deporte sea el kick boxing, porque se apuntan a cualquier pelea aunque ni siquiera esté de por medio un partido con el equipo del que son hinchas. Y con la política puede que tampoco, porque si lo que le gusta a esta gente es la violencia, en la política como en el deporte sólo buscan una causa para canalizar y justificar su violencia.