El robo de Repsol-YPF en Argentina por parte de Cristina Kirchner, exacerbando el sentimiento nacionalista, se basa en el odio a lo español y puede desencadenar fácilmente una respuesta basada también en el odio. Es fácil ver ahora a los argentinos como un todo y detestarlos a todos. Sin embargo no es una visión real ni justa de los argentinos.
Mauricio Macri es el gobernador de Buenos Aires, líder del PRO (Propuesta Republicana) y principal rival político de Cristina Kirchner. Si consultamos los principales diarios argentinos, como Clarín o La Nación, nos encontramos con que Macri se opone frontalmente al expolio decretado por Kirchner. El líder de la oposición declara con contundencia que “la medida va en contra de los argentinos” y “nos endeuda y nos aleja del mundo”, recomendando a sus propios compatriotas que “los argentinos seamos creíbles frente al mundo, no prepotentes”. Como la propia España, Argentina es un todo complejo. Lo rechazable no son los argentinos sino, en todo caso, algunas políticas probadamente fracasadas, cuyos resultados van a padecer además los propios argentinos. La respuesta social española no debe estar basada en la visceralidad sino en la racionalidad. De hecho, en la expropiación de YPF hay mucho que razonar.
Subvencionar el combustible conduce al desabastecimiento de combustible
Uno de los principales argumentos esgrimidos por el gobierno argentino para justificar el robo de YPF ha sido el hecho de que, siendo un país con grandes yacimientos, Argentina ha pasado de exportar combustible a tener que importarlo. En la base de este fenómeno, sin embargo, no se encuentra la maldad de las petroleras sino el combustible subvencionado. El populismo argentino lleva más de una década subvencionando la gasolina, convirtiendo a Argentina en uno de los países con la gasolina más barata del mundo. El resultado es que el precio de la gasolina no cubre adecuadamente los elevadísimos costes de producción y prospección de nuevos yacimientos. En consecuencia, las petroleras no invierten ni desarrollan el negocio. Verificando una vez más el principio general de que las subvenciones son intrínsecamente perversas, es la subvención e intervención estatal de los precios la que ha llevado al desabastecimiento.
El endeudamiento de YPF
Al no poder repercutir en el precio el coste de la producción y ser el del petróleo un negocio de elevada capitalización, YPF ha ido acumulando una deuda que ahora también quiere utilizar el gobierno argentino para minusvalorar el precio de una posible indemnización a Repsol. Paradójicamente, es de nuevo y por todo lo explicado el propio estado argentino, al fijar un precio artificialmente bajo del combustible, quien ha provocado ese endeudamiento.
Dividendos
Como ya mencionamos en una noticia anterior, la última pieza del dislate es la acusación a Repsol de distribuir el 90% del beneficio en dividendos, cuando este reparto también es una insólita imposición del gobierno argentino para que la familia Eskenazi, que obtuvo una importante participación en YPF con dinero prestado por la propia Repsol, pudiera devolver el crédito con los dividendos.
La moraleja del caso es que todos los perjuicios que podamos sufrir los españoles, así como los que sin ninguna duda van a acabar sufriendo los argentinos, derivan una vez más del intervencionismo, el estatalismo, el nacionalismo y el populismo. Echemos la culpa a todos estos factores más que cargar indiscriminadamente contra todos los argentinos.
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No hay más que ver cómo ha respondido la izquierda ibérica el desbarre de la izquierda de la pampa y rioplatense. Entre la sonrisa y el despiporre. Ya les gustaría a ellos hacer algo así, que desde la Guerra Civil no desvalijan las cajas fuertes y las de seguridad de los bancos, y tienen un monazo increible.
Montan filesas y cobran el diezmo, para ir tirando, pero lo de Argentina es lo que les pone en órbita.
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Al ver Morros de Silicona Fernández y su joven chiguagua querido, Axel Kicillof, que en españa, un tal Guerrrero y su chófer se podían pulir millones en coca, putas y regalos a sus amigos socio-listos sin control alguno; constatando que el partido en el gobierno, el de los manguis cursis con gomina – los de “amiguito del alma”-, hacían aeropuertos sin tráfico aéreo dónde se inmortalizaban en piedra… Y NO PASABA NADA; viendo que el registrador aplicado, jefe del gobierno, Sr. Rajoy, no se atreve a desmontar las 17 Taifas repletas de ladrones al acecho del botín; viendo que en españa se necesitas traductores para entenderse entre sus propias Taifas y que el rey, con una llamada al constitucional, cambia la doctrina de la prescripción para salvar de la cárcel a sus invitadores habituales de cacerías y de juergas; Viendo, digo, regocijados, el Paris-Match, dónde sale fotografiada “la otra reyna de españa”, por cierto, muy guapa y muy joven, deciden sacar el dedo a repsol, osea a españa y quedarse YPF para ella, su querido chiguagua Axel Kicillof y sus amigos ladrones afines, sabiendo que los políticos ladrones del otro lado del charco, osea de las taifas de aquí, no van a tener huevos para menear sus acojonados rabos. El próximo botín para Axel kicillof, el Banco de Santander, pero ojo, que ese Botín si tiene huevos y le puede cortar la lengua y los huevos al chiguagua.
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Ciert, el Sr. Rajoy, no se atreve a desmontar las 17 Taifas.
Por cierto, hecho en falta en estos foros comentarios sobre la familia real.
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